Aranda de Duero contará con un nuevo hospital “lo antes posible”. La Junta de Castilla y León todavía no se ha fijado fechas pero ya ha dado luz verde para su construcción y que sustituirá al actual Hospital Santos Reyes. Se hará con una inversión de 118 millones de euros, concedidos hoy por el Consejo de Gobierno, cifra a las que habrá que añadir, en su momento, el gasto necesario en montaje de mobiliario y equipamiento tecnológico y asistencial.
Ahora se sacará la licitación para que las empresas opten a ello, y cuando se realicen los trámites legales, será el momento de poner la primera piedra. “Cuanto antes”, ha sido la respuesta del portavoz de la Junta, Carlos Fernández Carriedo, sobre la pregunta de la puesta en marcha definitiva del recinto hospitalario. Hasta que llegue ese momento, el servicio se seguirá ofreciendo en Santos Reyes, donde, según Carriedo, se mantendrá “la misma calidad y atención hacia los pacientes”.
Así será
El nuevo hospital se levantará en un solar de 98.646 m², con una superficie construida de 48.294 m² -frente a los 11.361 actuales, es decir, un 425 % más-, y contará con edificios con dobles alturas y cinco áreas ajardinadas. En la planta baja se ubicarán las Urgencias, Diagnóstico por Imagen, el Hospital de Día, Diálisis, Extracciones y Rehabilitación, Admisión, Documentación Clínica, el área de Docencia e Investigación, además de parte de las consultas externas, el servicio de Farmacia, lencería y vestuarios, así como la cafetería, que tendrá zonas diferenciadas para usuarios y trabajadores.
La primera planta contará con la zona de Dirección y Gestión, el resto de las consultas externas y los gabinetes de exploración, los laboratorios, el Bloque Obstétrico, cerca del cual se ubicará la Unidad de Hospitalización Materno Infantil y los laboratorios. Esta planta también tendrá el Bloque Quirúrgico, con cinco quirófanos, el hospital de día quirúrgico, las endoscopias y la esterilización. El proyecto contempla también las habitaciones para personal de guardia y el servicio de Salud Laboral.
Las dos últimas plantas se van a reservar, según el estudio arquitectónico que guiará las obras, a la hospitalización de pacientes. Una de las novedades más destacadas es que esta área incrementa el número de camas, pasando de las 111 actuales a 144, repartidas en 75 habitaciones.