La Sierra de la Demanda-Pinares es un edén de naturaleza sorprendente en Burgos. He aquí diez planes para disfrutarla en otoño.
Cañón del Río Lobos
La Sierra de la Demanda es la entrada a uno de los enclaves naturales más espectaculares del territorio, el Cañón del Río Lobos. La aventura empieza en Hontoria del Pinar, que sirve como puerta de entrada a este impresionante cañón de escarpadas paredes rocosas y grandes extensiones de bosque. La variedad de terrenos acoge una gran diversidad de flora y fauna, entre la que destacan las aves rapaces.
Lagunas glaciares de Neila
Un paraíso de 6.860 hectáreas de belleza natural con una maravillosa peculiaridad: su singularidad geomorfológica, debido a sus formaciones de origen glaciar, causantes de su gran biodiversidad de flora y fauna.
Huellas de dinosaurios
Hace millones de años habitaban en la provincia de Burgos los animales más grandes de la faz de la tierra: los dinosaurios. Actualmentre es posible contemplar las huellas que dejaron a su paso por estos territorios gracias a los diferentes yacimientos de huellas que se pueden encontrar en Mambrillas de Lara, Regumiel de la Sierra y Salas de los Infantes. En esta última se encuentra el Museo de Dinosaurios.
Escenario de spaghetti western
Uno de los westerns más míticos del cine, ‘El bueno, el feo y el malo’, de Sergio Leone, se rodó a los pies de la Peña del Carazo, en el suroeste de la Sierra de la Demanda. Uno de los escenarios que aún hoy se puede visitar es el Cementerio de Sad Hill, que la asociación homónima ha recuperado para poner en valor los escenarios por los que pasaron Clint Eastwood, Eli Wallach, y Lee Van Cleef.
Cánticos en Santo Domingo de Silos
Fundado en el siglo XI, es famoso por su claustro monacal, considerado uno de los mejores ejemplos del románico a nivel mundial. En sus capiteles se pueden observar relieves hechos con una gran destreza artística que representan distintos temas. A la tranquilidad y la serenidad del monasterio le acompañan a diario los cantos gregorianos que se entonan en los oficios litúrgicos que se celebran cada día.
La Yecla, donde no llega el sol
El Parque Natural Sabinares del Arlanza-La Yecla esconde tesoros naturales que bien merecen ser descubiertos. Como el desfiladero que le da nombre, oculto entre las Peñas de Cervera.
La cuna de Castilla
El río Arlanza ha sido mudo espectador de la excelencia de Castilla y enmarca grandes joyas patrimoniales. Como las ruinas del monasterio de San Pedro de Arlanza, uno de los centros monásticos más importantes del reino de Castilla (no en vano, ondea el apelativo de “cuna de Castilla”), fundado en el año 912. Enclavado en un bello paisaje, este monasterio benedictino pervive en estado de ruina consolidada, formando una postal de excepcional belleza y una delicadeza sobrecogedora.
Atapuerca
Uno de los lugares del mundo más importantes para conocer la evolución humana está en la provincia de Burgos. Es el yacimiento de Atapuerca, donde se han encontrado restos humanos de más de 800.000 años de antigüedad, unos hallazgos que han permitido conocer más sobre la vida de los distintos tipos de homínidos a lo largo de la historia.
Safari entre animales prehistóricos
A solo 9 kilómetros de Atapuerca, en Salgüero de Juarros se encuentra Paleolítico Vivo: un safari fuera de lo común, pues permite viajar en el tiempo 10.000 años. Se trata del primer Parque Pleistoceno con animales vivos de Europa, en el que bisontes europeos y caballos de Przewalski, ambas en peligro de extinción, uros y tarpanes, ya extintos, viven hoy en libertad.
El cielo de Burgos
A 2.131 metros de altitud se halla el punto más elevado de la provincia: el Pico de San Millán, una cima desde donde contemplar la panorámica más impresionante de los macizos y valles.
Burgos, origen y destino
Burgos es origen de la lengua castellana, del primer hombre europeo, cuna de leyendas, cruce de caminos, así como punto de partida de relevantes hechos históricos que han dejado un legado cultural, arquitectónico, artístico y etnográfico. A su vez, Burgos es destino para todos aquellos que buscan un viaje lleno de sensaciones donde el patrimonio, la naturaleza, la gastronomía y la historia van de la mano.