Lo que debería ser una fiesta en Aranda de Duero con la llegada del Real Madrid, en principio al municipio burgalés, se ha convertido, en las últimas horas, en un cruce de acusaciones entre el Ayuntamiento, liderado por el alcalde Antonio Linaje, de Sentir Aranda, y la directiva del conjunto ribereño. Cabe recordar que la presidenta de la Arandina, Virginia Martínez es concejala del PP en el consistorio arandino y que la agrupación de electores comandada por Linaje, arrebató la Alcaldía a los “populares” en los últimos comicios municipales.
A la espera de que la Federación Española de Fútbol confirme que el choque de los dieciseisavos de final de la Copa del Rey se disputa en el estadio Juan Carlos Higuero, el alcalde, Antonio Linaje ha acusado al secretario del club de verter “graves insultos contra él”, tras irrumpir en una conversación que mantenía con la presidenta.
El último capítulo en esta guerra lo ha protagonizado un comunicado que ha emitido la Arandina en el que da “por rotas” las relaciones con el primer edil y con la concejala de Deportes, Belén Esteban.
“La Arandina C.F. siempre ha mostrado respeto a esta corporación municipal, tanto públicamente como de modo privado. Ante las graves acusaciones públicas de Antonio Linaje que se hacen públicas por él mismo, y que perjudican gravemente al desarrollo de la actividad normal de este club, solicitamos la designación de un nuevo interlocutor para poder empezar con los trabajos de preparación del evento de mayor interés social y deportivo de la historia de nuestro club”, argumenta en el escrito.
Añade que “han sido varios los compañeros de la Junta Directiva que han tenido que vivir y sufrir lo acontecido en estos días” y que este viernes “se personaliza públicamente en la figura del secretario”.
El club apunta que “tiene que seguir con la normalidad que le ha hecho poder vivir un momento histórico para Aranda de Duero” y desea que “sea tratado con la normalidad de lo que realmente somos” apunta, un club que busca “seguir aportando todo lo que está en sus manos a la sociedad arandina y de la que se siente un enorme orgullo y sentimiento de pertenencia”.
El Ayuntamiento asegura que trabaja para que sea un día histórico
Desde el Ayuntamiento de Aranda de Duero también han emitido un comunicado en el que aseguran que “seguirán trabajando al máximo de sus capacidades para que el partido de Copa sea un evento histórico en nuestra ciudad”.
Un choque que se disputará el 6 de enero. El consistorio arandino ha añadido que el Ayuntamiento “ha invertido todos los recursos personales, materiales y económicos, asumiendo el coste de todos los requerimientos exigidos por la Real Federación Española de Fútbol para que pudiese celebrarse en las mejores condiciones posibles”.
Continúa afirmando que en los partidos coperos, el consistorio ha hecho “inversiones importantes para adaptarse a los mínimos de iluminación exigidos por la Federación” y para “garantizar la evacuación con la instalación de escaleras y rampas de seguridad” o la “mejora del campo a través de la contratación de una empresa especializada” y también con la instalación de gradas complementarias para ampliar el aforo en casi mil personas. Además del gran despliegue en materia de seguridad.
“Como no puede ser de otra manera y, aparcando la situación desagradable que se ha producido, el Ayuntamiento quiere reiterar su máximo compromiso y responsabilidad con la organización del partido y con el club. Desde el primer minuto después del sorteo se trabaja en materia de seguridad y acondicionamiento del campo, así como en la tramitación económica y todas las cuestiones que afectan a la organización del evento”, añade el consistorio.
Finaliza añadiendo que el Ayuntamiento seguirá trabajando al cien por cien, poniendo “todos los medios materiales y personales para que el evento más importante de la historia del deporte en Aranda tenga el éxito que merece”.
La fiesta que se vivió el martes con el sorteo se ha tornado ahora en polémica en Aranda de Duero.