El arte volvió a ser el foco de atención en las calles de Burgos durante este fin de semana, aunque esta vez de la mano de los cientos de flores que decoraron distintos monumentos y edificios de la ciudad. Una nueva edición de la Fiesta de las Flores fue la responsable de este estallido de color que decoró con los diseños más originales y llamativos el centro de Burgos, y que durante un fin de semana de buenas temperaturas atrajo a centenares de burgaleses.

La asociación de Floristas y Jardineros de Burgos (Flojabur) organiza un año más esta popular fiesta que desde hace más de una década da la bienvenida a la primavera en la ciudad, de la mano de originales y exclusivos diseños florales, así como actividades de todo tipo y dirigidas a todos los públicos. El evento se inauguró el pasado viernes 10 de mayo, y

La pintura fue el hilo conductor de esta edición, con once monumentos florales inspirados en las obras de grandes artistas como Vincent Van Gogh, Pablo Picasso, Monet, Diego Velázquez, Frida Kahlo, Vasili Kandinski, Joaquín Sorolla, entre otros. Para esta edición además se quiso hacer un homenaje al artista burgalés fallecido en 2015, Ignacio del Río.

Una obra con la que han querido reconocer al prestigioso artista, y para ello han contado con la ayuda del escultor Cristino Díez, que ha elaborado un gallo metálico en representación de los característicos gallos que pintaba el propio Ignacio del Río. Alrededor de esta escultura, los floristas han trazado con flores en tonos naranjas, rojos y negros las características líneas del artista burgalés, para rendir homenaje así a sus obras.

La presidenta de Flojabur, Blanca Jimena Barriuso explica que para esta edición se optó por la pintura debido a que las flores son también un arte, y querían unir ambas mundos para crear un evento que llamase la atención de los burgaleses y visitantes. “Al final ha sido un acierto porque las representaciones son muy bonitas”, afirma, que confiesa que le es imposible elegir un solo monumento floral entre todos los que componen la edición, dado que todos le parecen “súper bonitos”, y están hechos “con mucho cariño”.

Sin embargo, sí que confiesa que la edición de este año es muy especial para ella, y considera que todo ha quedado incluso “más bonito” que al año anterior. “Al final vamos aprendiendo y a mi modo de pensar, este año va a gustar”, añade.

Las primeras opiniones no tardaron en llegar, y los ciudadanos que paseaban por el centro burgalés manifestaron su entusiasmo por esta edición, que incluso Barriuso señaló que estaba gustando “más” que la edición anterior. Sin embargo, los gustos por los monumentos florales eran muy diversos, y cada persona consultada destacaba uno diferente.

Llamaba especialmente la atención el monumento floral situado en el Templete del Paseo del Espolón, que se basaba en el cuadro de Salvador Dalí ‘La Persistencia de la Memoria’. De esta forma, se recreaba la pintura en formato 3D con una visión del Templete de la Música desde las distintas perspectivas. Los característicos relojes derretidos de este cuadro se podían apreciar en el interior del templete y las flores y plantas completaban este original diseño.

La fachada del Ayuntamiento de Burgos fue otra de las grandes favoritas, con un diseño inspirado en la obra ‘La noche estrellada’ de Van Gogh; los siete cubos del Paseo del Espolón que representaban las siete etapas de Picasso; o aquella decoración floral que se inspira en los cuadros de Sorolla realizados en la plaza de la Malvarrosa, con una representación alegórica de los barcos de vela latina. La inigualable Frida Kahlo también se dejó ver en el Paseo del Espolón de la mano de una original composición floral basada en los conocidos autorretratos de la artista. Asimismo, las famosas ‘Meninas’ de Velázquez daban la bienvenida a los visitantes en el Arco de Santa María, así como unas coloridas ovejas de flores.

En la edición de este año, unos 200 voluntarios han prestado su ayuda para la decoración y montaje, 50 de ellos eran floristas llegados de las principales escuelas del país, así como unos 70 voluntarios del centro ‘María Madre’, a los que se sumaban otros 50 jóvenes del centro juvenil de la parroquia ‘Sagrada Familia’, que llevó a escena el musical ‘Los Miserables’ en el Teatro Clunia y que durante este evento floral animó las calles con representaciones de parte de este espectáculo.

Talleres de peluquería y estética y de cocina, así como espectáculos de magia y actuaciones musicales de la mano de Roberto Domínguez completaban también este original programa de actividades, que tal y como asegura la presidenta de Flojabur, Blanca Jimena Barriuso, han tenido una gran acogida.

Evolución

La Fiesta de las Flores es un evento ya consolidado en el calendario burgalés. Desde sus inicios en la Plaza Huerto del Rey, donde los floristas burgaleses decoraban una fuente, hasta el momento actual que llena de color el centro de la ciudad, no ha dejado de crecer. Así lo indica uno de los miembros de Flojabur y responsable de Cultura de Flor, David Ruiz, que pone en valor la “repercusión” que tiene esta fiesta para la ciudad, tanto a nivel económico como turístico y publicitario. “Vivimos en la época de la imagen. La redes sociales mandan, así que es la fiesta perfecta para hacer fotografías”, afirma.

Tanto Ruiz como Barriuso destacan el gran trabajo que lleva organizar este evento, que de hecho empiezan a preparar con varios meses de antelación. Por ello, una vez acabe la presente edición, al igual que ocurre con las Fallas de Valencia, tal y como bromeó Ruiz, comenzarán a preparar la próxima edición, con el objetivo de mejorar cada año sus propuestas.