El Instituto de Investigación Biosanitaria de Burgos se convertirá en realidad a principios de 2025. Así lo ha comunicado este viernes la Consejería de Sanidad de la Junta de Castilla y León, que ha avanzado que la rúbrica del convenio con la Universidad de Burgos (UBU) se realizará en el primer trimestre del próximo año.
Se unirá así al de Salamanca, que surgió en 2011, el de Valladolid, creado recientemente, y el de León, firmado este mismo año. El anuncio se ha hecho tras la reunión que el consejero de Sanidad, Alejandro Vázquez, ha mantenido con el rector de la UBU, Manuel Pérez Mateos, que han mantenido un encuentro para avanzar en la puesta en marcha del IBioBurgos.
Este nuevo instituto ubicará su sede física en el Hospital Divino Valles y completará una infraestructura de cuatro entidades en Castilla y León con estas características. Por un lado, se encuentra el IBSAL de Salamanca, acreditado por el Instituto de Salud Carlos III, y el IBioVall y IBioLEÓN. La creación del de Burgos conformará una red de centros que fortalecerá la colaboración entre el sistema científico, a través de las universidades, y el sistema sanitario de la Comunidad.
La infraestructura permitirá potenciar la investigación e innovación sanitaria en Burgos y la provincia, tanto en el ámbito preclínico y básico, como en el traslacional y clínico, sumando los recursos investigadores de la UBU, representados especialmente por los grupos y las unidades de investigación consolidadas o los centros de investigación como el Centro de Investigación de Patógenos Emergentes; el Complejo Asistencial Universitario de Burgos; el Hospital Santiago Apóstol; el Hospital Santos Reyes de Aranda de Duero; el Servicio Territorial de Sanidad; y la Gerencia de Atención Primaria.
Entre las posibles líneas clave de investigación que quiere abordar el nuevo IBioBurgos está la hematología, incluida la pediátrica, oncología, neurología o cardiología, además de la salud pública en la vertiente de seguridad o alimentación y estilos de vida.
También desarrolla proyectos en el ámbito de la farmacia, de la medicina de precisión y en cuidados, alguno de ellos muy relacionados a la Atención Primaria, y la aplicación de las nuevas tecnologías en el sector industrial desde el aspecto de la bioingeniería, con aplicación al sector salud -industria 4.0- y la utilización de la inteligencia artificial en el ámbito sanitario.
Áreas en los que la UBU cuenta con titulaciones implicadas tanto en la Facultad de Ciencias de la Salud o en la EPS, como es el caso de la Ingeniería de la Salud.
Con la puesta en marcha en 2025, la Junta pretende así impulsar la transferencia de los resultados de la investigación en la provincia burgalesa, que cuenta entre sus capacidades para la investigación e innovación con otros agentes como el Centro Tecnológico de Miranda de Ebro (CTME), el Instituto Tecnológico de Castilla y León (ITCL) –ambos con una OTRI para la transferencia de resultados– y el International Research Center in Critical Raw Materials for Advanced Industrial Technologies (ICCRAM) de la Universidad de Burgos, todos ellos focalizados en el desarrollo tecnológico de la industria 4.0 y sus diferentes aplicaciones sectoriales, entre las que se encuentra el sector salud incluido el ámbito sanitario.