En estas últimas semanas, en las redes sociales de Hugh Elliott, embajador de Reino Unido en España y Andorra, se puede seguir el día a día de un bonito y reconocido gesto. El representante diplomático ha iniciado un reto deportivo de 1.000 kilómetros por los enfermos de esclerosis múltiple, a la vez que recauda fondos para las asociaciones que ayudan a familias y afectados, teniendo como objetivo los 10.000 euros.

Hasta aquí todo normal. Ni Hugh es el primero ni, afortunadamente, este es el único reto de estas características. Son varias las personas que a lo largo del año inician objetivos solidarios de la misma naturaleza, por fortuna. Pero la historia por la que el embajador británico lucha contra la esclerosis múltiple toca muy de lleno a Castilla y León. Y tiene como protagonista a una burgalesa.

Era diciembre de 2019, cuando Hugh Elliott, que prácticamente estrenaba su cargo como embajador, realizaba su primera visita al norte de España. Concretamente a Burgos. Fue ahí, en la ciudad castellana, donde contó algo que le sucedió en 1984, cuando pisó nuestro país por primera vez.

El británico, en un español perfecto, recuerda que se trasladó en tren desde Carcassonne (Francia) hasta Burgos, para realizar desde ahí el Camino de Santiago en bicicleta. Pero ésta desapareció. Hugh, relata, no disponía de mucho dinero y el camping donde iba a alojarse se encontraba a varios kilómetros, por lo que no le quedó otra que ir a un bar para "reflexionar" y ver qué hacer.

Fue ahí donde conoció a un joven canadiense, a quien le desveló todo lo que le había ocurrido. Y aquí entra en juego Lourdes Arnáiz, novia del canadiense y protagonistas de esta historia. "No dudó en invitarme a hospedarme con ella y su hermano en la ciudad", señalaba hace cinco años el embajador británico.

Un gesto por el que Hugh Elliott estaba todavía tremendamente agradecido varias décadas después. Se hospedó con Lourdes y su familia durante cinco días, hasta que la bicicleta llegó por fin a la estación. "Yo, un desconocido, estuve en su casa cinco días y sin que me dejaran pagar nada. ¿En cuántos países se habría acogido a un extranjero así? Mi afecto por este país y el pueblo español comenzó aquí, en Burgos, hace 35 años. Siempre he estado agradecido y si sigues aquí, Lourdes, te digo gracias de nuevo. Me encantaría decírtelo en personas", incidía en su vídeo de entonces.

Una declaración de intenciones para poder reencontrarse con la burgalesa que no dudó en echarle un capote hoy hace ya 40 años. La historia se hizo viral y ayudó a que Hugh Elliott pudiera dar con la familia Arnáiz. Sin embargo, el final no fue del todo el esperado.

Fue Alfonso Arnáiz, el hermano de la burgalesa, quien contó al diplomático británico que Lourdes había fallecido con 35 años a causa de la esclerosis múltiple. "Gracias a vosotros conseguí tener noticias de ella, pero ahora viene la parte más triste", señalaba entonces Elliott.

"Lamento mucho tener que decir que Lourdes falleció con 35 años a causa de la esclerosis múltiple. Había esperado otro desenlace pero no pudo ser", reconoció. Y fue esta historia, la de un agradecido Hugh Elliott con la burgalesa Lourdes Arnáiz, la que está detrás de este bonito reto deportivo que el embajador británico ha emprendido en estos últimos meses en el cargo.

"La esclerosis múltiple es una enfermedad devastadora para los afectados, así como para sus seres queridos. Muchos conocemos al menos a algún afectado y hay asociaciones que ayudan en toda España. De hecho hay dos en Burgos, una en Santiago de Compostela y una nacional. Cada uno podemos aportar nuestro granito de arena. Gracias por vuestra ayuda y vuestro interés", concluía entonces en 2019.

Hoy, en 2024, Hugh Elliott sigue acordándose de Lourdes y, como agradecimiento a su hospitalidad en 1984, el diplomático lucha contra la esclerosis múltiple a través de su reto de 1.000 kilómetros y la recaudación de 10.000 euros en favor de la asociación Esclerosis Múltiple España.