La Policía Local de Burgos y un menor de 16 años han salvado la vida de un hombre de 61 años haciendo uso del desfibrilador.
Los hechos tuvieron lugar unos días atrás cuando, sobre las 07:00 horas, un hombre se desplomó en el interior de una furgoneta mientras repartía frutas de Villafría.
Rápidamente, un joven de 16 años vio lo que sucedía y, tras comprobar la ausencia de pulso en la víctima, comenzó a realizar la maniobra RCP, mientras daban aviso a los servicios de emergencia del 112.
Rápidamente, una patrulla de la Policía Local que lleva como dotación el desfibrilador automático, acudió en auxilio de la víctima.
Cuando llegaron al lugar, los agentes encontraron al menor realizando el masaje cardiaco, por lo que procedieron a dar relevo en la maniobra de reanimación, colocándole el DEA.
Fueron dos las descargas que tuvo que recibir este hombre de 61 años para que, finalmente, su corazón volviera a latir. Después lo colocaron en posición lateral de seguridad a la espera de la llegada de los servicios sanitarios.
Posteriormente, fue evacuado a los servicios de urgencia del HUBU tras comprobar las constantes y quedará estabilizado. La determinación, rapidez y eficacia en las maniobras realizadas por este héroe de solo 16 años.