El PP leonés cierra filas en torno a Silván
No faltó nadie en la primera comparencia pública del alcalde de León, Antonio Silván, como candidato a la presidencia del Partido Popular de Castilla y León. El apoyo ha sido unánime: concejales, parlamentarios, procuradores, diputados provinciales, ejecutiva provincial y portavoces de todas las instituciones acudieron a la sede a una acto que, en principio, era una rueda de prensa y que se acabó convirtiendo en una demostración interna de adhesión al líder. Junto a Silván, en lugar destacado, el presidente de la Diputación, Juan Martínez Majo; y el del partido provincial, Eduardo Fernández.
La llegada de Silván a la sede del PP ya fue espectacular. Abrazos, sonrisas, apretones de manos para todos, incluidos con los periodistas. Este es un terreno que domina perfectamente Silván: las relaciones públicas y el contacto personal cara a cara.
Ya dentro y ante los medios, el mensaje fue otra cosa distinta. Dejó mucho que desear. No contestó a la pregunta de qué diferencias separaban su proyecto político como candidato a la presidencia del PP de Castilla y León con el de su opositor, el alcalde de Salamanca, Fernández Mañueco. "Eso es un tema profundo que requiere tiempo para explicarlo".
Tampoco contestó a la pregunta de si existía un pacto entre ambos candidatos para si ganaba Silván, Mañueco sería su secretario general y viceversa. Silván se limitó a contestar que "eso son conversaciones privadas y se quedan en el ámbito de lo privado".
Seguirá siendo alcalde
Lo que sí dejó claro fue su decidida voluntad de seguir siendo alcalde de León, un cargo que "es absolutamente compatible" con la presidencia del Partido Popular. "Mi compromiso es con los ciudadanos de León y lo cumpliré", añadió, al mismo tiempo que dejó patente que "tengo un gran equipo en el Ayuntamiento", algo que es de vital importancia, toda vez que Silván ha anunciado que en las próximas semanas recorrerá toda la Comunidad en busca de apoyos de los militantes y compromisarios del partido.
En este sentido, tampoco quiso entrar a valorar la posibilidad de que si ganase estas elecciones internas, tenga que dedicarse a corto plazo más a la política regional que a la local de cara a su posible candidatura a la Presidencia de la Junta en las elecciones de 2019: "Queda mucho para todo eso. Vayamos partido a partido", señaló imitando al entrenador atlético Simeone.
Sobre Mañueco, Silván se limitó a indicar que "serán los afiliados quienes elijan al mejor candidato" y desveló que el único acuerdo entre ambos es la limitación a 150 los avales que presenten cada uno, ligeramente por encima de los 90 necesarios. Con esta decisión quieren evitar una guerra interna por presentar el mayor número de respaldos.
Conocedor de Castilla y León
Silván destacó que uno de sus principales activos es su profundo conocimiento de Castilla y León, algo que lo había conseguido en su etapa de consejero de Fomento: "Conozco hasta el último rincón de esta tierra y sé cuál es el sentir de sus gentes", afirmó.
En su discurso de presentación él mismo se hizo la pregunta de qué quiero y la respondió: "Un Partido Popular más abierto, cercano a los ciudadanos, a las necesidades del hombre de la calle; un partido más implicado, ilusionado, orgulloso y cercano."
Al referirse a Herrera, le faltaron elogios para destacar su figura personal y política: "Herrera es el mejor político de Castilla y León, es un político insuperable, es mi amigo y mi jefe, un gran trabajador y una persona que siempre va a estar ahíi, colaborando y ayudando"-
Y concluyó con una cita de Platón: "Un hombre que no arriesga por sus ideas, o no valen sus ideas o no vale como hombre".
Palabras que fueron respondidas con un aplauso cerrado de todos los altos cargos que presenciaron la rueda de prensa. Y Silván se fue como había llegado, en olor de multitudes de los suyos. Está claro que León cierra filas por Silván.
Empresa Familiar
Y de la sede del PP al salón de actos del Ayuntamiento, donde la Asociación de Empresa Familiar de Castilla y León celebra esta mañana su asamblea general anual. El recibimiento fue parecido al de la sede. Abrazos, parabienes, sonrisas, apretones de mano, felicitaciones y apoyos. Silván no dudó en posar ante los fotógrafos y dar por inaugarada la Asamblea.