Avance en la prevención de dificultades de aprendizaje en la escritura
La revista de alto impacto ‘Reading and Writing’ publicó el pasado mes de enero un artículo titulado ‘Supporting first-grade writers who fail to learn: multiple single-case evaluation of a Response to Intervention approach’, que recoge los resultados de un estudio realizado con una muestra de 179 estudiantes de 1º de Educación Primaria. Dicho estudio ha supuesto una significativa contribución en el ámbito educativo, tanto a nivel científico como a nivel aplicado, ya que permite un avance en torno a las teorías sobre el desarrollo de la competencia escrita del alumnado.
El estudio forma parte de un proyecto de investigación competitivo concedido a la Doctora Raquel Fidalgo Redondo dentro de la Convocatoria 2016 del Programa de Ayudas de la Fundación BBVA a Investigadores y Creadores Culturales, y de la tesis doctoral de María Arrimada García, codirigida, junto a la Dra. Fidalgo por el Dr. Mark Torrance de Nottingham Trent University (UK), experto de reconocido prestigio internacional en el estudio de la escritura desde perspectivas cognitivistas.
Se trataba de aplicar al ámbito de la escritura el Modelo de Respuesta a la Intervención (RTI), ampliamente validado en el contexto internacional, principalmente en EEUU, para la prevención y detección de las dificultades de aprendizaje.
UN APOYO ADICIONAL MEJORA SUSTANCIALMENTE LAS HABILIDADES
EL objetivo general fue el de promover la adquisición de una adecuada competencia escrita en todo el alumnado, a través de la detección precoz de aquellos en riesgo de presentar dificultades de aprendizaje. En segundo lugar, se trataba de ofrecer una instrucción eficaz, avalada científicamente y adaptada a las diferentes necesidades, desde el primer curso de la Educación Primaria, es decir, al inicio de la instrucción formal de la ‘lecto-escritura’.
Para ello se proporcionó a los estudiantes objeto de la investigación una instrucción centrada en procesos de transcripción, como caligrafía y ortografía y procesos de composición escrita, como la planificación textual. El progreso del aprendizaje del alumnado fue controlado de forma semanal. De esta manera se detectó a quienes podrían presentar en el futuro dificultades en la escritura. En una segunda fase, una docena de alumnos recibieron un apoyo adicional semanal, individualizado, realizado por sus familias fuera del horario escolar y ajustado específicamente al perfil escritor de cada uno.
La evaluación demostró que un porcentaje considerable del alumnado que recibió este segundo nivel de intervención, mejoró sustancialmente sus habilidades de ortografía, caligrafía y planificación textual, llegando incluso a situarse al nivel medio de su grupo de referencia. Los resultados de este estudio sugieren la eficacia de este enfoque para la prevención de las dificultades de aprendizaje en la escritura.
Además, sustentan la necesidad básica, recogida a nivel legislativo en nuestro país, de dar respuesta a la prevención de las dificultades de aprendizaje del alumnado, y de fomentar en todos ellos el logro del desarrollo de la competencia escrita.
Por todo ello, este trabajo que implementa los avances científicos a nivel instruccional en la escritura dentro del marco proporcionado por el modelo RTI, tiene gran relevancia internacional. Hay que considerar que apoya el hecho de que incorporar la instrucción en procesos de alto nivel cognitivo (i.e planificación textual) a la enseñanza de la escritura en los primeros cursos de la educación primaria, mejora la escritura del alumnado, a pesar de no haber adquirido aún un dominio de las habilidades más básicas de ortografía y caligrafía.
En definitiva, la importancia social y académica de la competencia lingüística, unida a la elevada prevalencia de dificultades de aprendizaje en el alumnado, justifican la relevancia aplicada de estudios como el publicado por ‘Reading and Writing’.