Inyección económica para restaurar dos monumentos en El Bierzo
La Junta de Castilla y León ha procedido a la firma del acta de replanteo e inicio de las obras en dos monumentos del Bierzo; en concreto, en la Iglesia de Santa María de Vizbayo (Ponferrada), monumento declarado como Bien de Interés Cultural en 1982, y a la de la casa colgante del Castillo de Cornatel, en Villavieja (municipio de Priaranza del Bierzo). Los trabajos se centrarán en la adecuación del entorno y en la reparación de elementos, tanto exteriores como interiores, así como la limpieza vegetal de la zona.
Por una parte, la inversión de la Consejería de Cultura y Turismo en el caso de la Iglesia de Santa María de Vizbayo asciende a 125.268 euros, incluidos los honorarios de dirección de obra correspondientes. El plazo de ejecución previsto es de seis meses y el proyecto corre a cargo del arquitecto Jesús Castillo Oli.
Está prevista la limpieza de los escombros existentes en el entorno y al desbroce de la parcela para la realización de los posteriores trabajos en el terreno. Se derribará la caseta de apeos metálica que actualmente se ubica en la zona exterior de la Iglesia. En la zona del atrio se desmontarán las lajas de pizarra de la cubierta que se encuentren en malas condiciones y el entramado de madera que forma la estructura de ésta y se sustituirán las vigas de madera que se encuentran en mal estado. El tablero de formación de cubierta se sustituirá en su totalidad. El muro perimetral de bloques de hormigón que delimita el entorno exterior se derribará también para ser sustituido por uno nuevo, así como la carpintería metálica de acceso a la zona. Se consolidará el paramento occidental del atrio y se realizará una limpieza del paramento norte de la Iglesia. Por último, el tejadillo que se ubica por encima del portón norte se demolerá y será sustituido por uno nuevo.
El templo de Santa Maria de Vizbayo se localiza a unos 200 metros al norte de la localidad de Otero, población próxima a Ponferrada, situado sobre un cerro emplazado en la margen izquierda del río Boeza. Probablemente se trate de uno de los templos más antiguos de todo el Bierzo, en estilo románico de finales del siglo IX. En él se aprecia la mezcla de un claro románico con reminiscencias del mozárabe.
Atendiendo a cuestiones meramente estilísticas e históricas, se sitúa el origen de este templo entre los años 1100 y 1150. Es un templo románico de una sola nave de tipo basilical con cabecera semicircular y cubierta a dos aguas sobre bóveda de cañón rematada con casquete esférico en el ábside. Los muros son, o bien de sillería irregular, o bien de mampostería reforzados en las esquinas con sillares. Éstos están perforados tan solo por pequeñas ventanas, tipo saeta. La puerta principal está orientada al norte. Al exterior está decorada en el sector de la cabecera con una línea de ajedrezado. En el siglo XVII se añadieron la sacristía, el atrio y la espadaña.
La casa colgante del Castillo de Cornatel
Por otra parte, la casa colgante del Castillo de Cornatel, ubicado en la localidad de Villavieja (Priaranza del Bierzo), se trata de uno de los elementos más frágiles del conjunto histórico por su ubicación en el precipicio rocoso que circunda el recinto por su lado oriental. El ámbito del proyecto actual incluye la totalidad del mencionado edificio, la única parte de la última época del conde de Lemos que no había sido intervenida antes, aunque también hay obras puntuales en otras zonas del conjunto.
La intervención, cuyo presupuesto es de 311.532 euros, se centrará fundamentalmente en la consolidación de fábricas y sus huecos de acceso reponiendo las piedras del arco y la mocheta, como se ha hecho en otros huecos del castillo. También se propone aprovechar la intervención para desforestar y desescombrar el camino de acceso y el interior de la casa a fin de que puedan estudiarse pormenorizadamente. Por último, el proyecto recoge la reposición de cubierta y forjados básicos, pero sin necesidad de habilitar la dependencia para otro uso que no sea el de su recorrido y disfrute de los visitantes.
La obra está financiada también de manera íntegra por la Consejería de Cultura y Turismo y el plazo de ejecución previsto es de seis meses.