La EIAF intensifica las prácticas externas para facilitar la empleabilidad de su alumnado
La formación integral de los ingenieros agrarios e ingenieros forestales requiere un contacto constante y real con las demandas del mercado laboral, que busca titulados que puedan resolver los problemas reales a los que se enfrentan cuando se integran en las empresas y en las administraciones públicas. Por ello, la Escuela de Ingeniería Agraria y Forestal (EIAF) de la Universidad de León apuesta activamente por las prácticas externas, que preparan a los alumnos para el ejercicio de la actividad profesional, facilitan su empleabilidad y fomentan la capacidad de emprendimiento, tres aspectos claves para acceder al mercado de trabajo. Durante este último curso en el Grado de Ingeniería Agraria los alumnos realizaron más de 30 prácticas externas, mientras que en el Grado de Ingeniería Forestal y del medio natural fueron 26 los alumnos que se beneficiaron de este programa.
Estas prácticas se realizan tanto en empresas punteras del ámbito agrario y forestal (Bayer, TRAGSA, Aperitivos y Extrusionados S.A., Agroseguro, Tecnosylva, Föra, ENCE, etc.), como en la administración pública (Junta de Castilla y León, ayuntamientos) o en centros de investigación de la propia universidad o externos (Instituto de Medio Ambiente, Recursos Naturales y Biodiversidad, Instituto de la Viña y el Vino, NEIKER, HAZI, CIUDEN), que ven en esta colaboración no sólo una responsabilidad social sino también una forma de captar talento para la empresa.
UNA OPORTUNIDAD DE APRENDIZAJE
En el grado de Ingeniería Agraria, durante el periodo 2013-2020, se han realizado 217 prácticas en empresa. La valoración de los estudiantes de las mismas es muy positiva (superior a 8 sobre 10), considerándolas el 90% de ellos como una oportunidad de aprendizaje. Jacobo Alonso Santos, Director General de AGC Agrocantabria y exalumno de la EIAF, hace hincapié en que “hacer las prácticas me dio mucho más que una mejor preparación para acceder al primer trabajo, directamente me introdujeron en el mercado laboral, consiguiendo mi primer empleo en Cooperativa LAR y posteriormente en Agrocantabria”.
Mario González Morala, Director de Planta de Grupo Apex (Aperitivos y Extrusionados S.A.), destaca que “he tenido alumnos de la Escuela en prácticas en empresa desde hace muchos años, siendo la experiencia con ellos muy positiva; la mayor parte han dejado su huella en la fábrica, aportando ideas y puntos de vista diferentes a las operativas y procedimientos de trabajo que se les ha enseñado”. Considera que “estas prácticas aportan conocimiento práctico del funcionamiento de la empresa privada, siendo testigos los estudiantes de cómo es el día a día de compañeros que han tenido su misma formación. Además, son una vía de acceso al primer empleo”.
El programa de prácticas remuneradas en el Operativo de Lucha contra Incendios Forestales de la Junta de Castilla y León ha permitido que desde el año 2000, más de 266 alumnos del Grado de Ingeniería Forestal y del Medio Natural hayan podido combinar los conocimientos teóricos de lucha contra incendios con los de contenido práctico. Pedro Bécares, Jefe de la Sección de Defensa del Medio Natural de la Junta de Castilla y León en León, y tutor de estas prácticas las destaca “como una de las mejores formas de introducir a los alumnos en el mundo laboral, con una experiencia en materia de incendios forestales, que sólo puede conseguir mediante su integración en el Operativo como técnicos de base y técnicos de apoyo”. Miriam Zamora realizó estas prácticas como alumna en 2015 y “lo que piensas que será un pequeño trabajo de comienzo y que no marcará mucho en tu carrera profesional, para mí fue todo lo contrario, me permitió trabajar desde entonces en el Operativo de Lucha contra incendios, como técnico de apoyo, escucha de incendios y con un contrato con la empresa TRAGSA en la actualidad. Eva Díez, que actualmente está contratada por TRAGSA como técnico de apoyo, realizó estas prácticas en 2018 y 2019 y destaca que “me han aportado la experiencia, seguridad y decisión que necesita cualquier recién titulado para adentrarse en el mundo laboral”.
APLICAR CONOCIMIENTOS Y GANAR EXPERIENCIA
Pablo Puente realizó sus prácticas del Grado de Ingeniería Forestal y del Medio natural en IDM Timber, empresa berciana especializada en el diseño, cálculo, fabricación y montaje de estructuras de madera, en la que trabaja en la actualidad como ingeniero. Para Pablo las prácticas externas fueron “un punto de partida en una etapa temprana del desarrollo profesional, que te permite dilucidar si te gusta este campo o no. En mi caso es un campo que me ha gustado desde que lo conocí y he tenido la suerte de entrar a trabajar y quedarme en la empresa donde he realizado las prácticas. Recuerdo aun cuando vi el anuncio colgado en el tablón de la universidad y me decidí a llamar, sin saber a qué me iba a enfrentar, pero ha resultado ser una de las mejores decisiones de mi vida”. Además destaca que “son créditos que te permiten alcanzar el objetivo de lograr el título, además de iniciar la incorporación en el mercado laboral, donde aplicas los conocimientos de base que has adquirido durante la carrera, además de adquirir nuevos que trae consigo la experiencia laboral. Las prácticas te permiten resolver la eterna pregunta del estudiante “para qué quiero yo saber hacer eso” que te planteas durante la carrera”.
Eugenia Iturritxa, tutora de prácticas del área forestal en NEIKER-Tecnalia (Instituto Vasco de Investigaciones Agrarias), destaca que estas prácticas “refuerzan la capacidad didáctica de la empresa” y que “a los alumnos les da una visión más clara de las posibilidades que ofrece el mundo laboral y, en este caso, de cómo afrontar diferentes retos laborales desde la perspectiva de la investigación aplicada”. Aitor Saez, recién titulado del Grado de Ingeniería Forestal y del Medio Natural realizó sus prácticas en NEIKER-Tecnalia durante este último año, lo que le ha permitido “recibir una formación muy técnica y de gran calidad, aprendiendo técnicas de laboratorio y manejo de equipo técnico y software de difícil acceso, de última tecnología (como el manejo de equipos PCR para identificar enfermedades forestales) y que son de gran utilidad para el sector forestal y para la gestión de nuestros ecosistemas”.
SECTORES ESTRATÉGICOS Y ESENCIALES DURANTE LA CRISIS
La Escuela de Ingeniería Agraria y Forestal de la Universidad de León ha intensificado en estos últimos años el contacto con empresas y entidades, para ofrecer una amplia oferta de prácticas, realizando actividades de orientación y promoción que permiten que todo el estudiante que quiera pueda realizarlas, contando, además, en algunos casos con una remuneración o algún tipo de compensación económica.
Aunque este ha sido un curso especialmente complicado debido al confinamiento generado por la crisis del COVID-19; sin embargo, al ser las actividades agrarias y forestales esenciales, la actividad de numerosas empresas de estos sectores se ha mantenido durante dicha crisis. Y es que, como se ha puesto de manifiesto en los últimos meses, los sectores agrario y forestal son estratégicos y por grave que sea la situación la producción agraria, de alimentos, de madera y de papel no se detienen. Por ello las ofertas empleo se han mantenido durante este período. En concreto de abril a junio, a pesar de las limitaciones impuestas por el estado de alarma, se han publicado 15 ofertas nuevas de trabajo en la página web de la Escuela. Esta formación práctica ha permitido que durante los últimos 5 años, prácticamente la totalidad de los titulados del Grado de Ingeniería Agraria y más 85% de los titulados del Grado de Ingeniería Forestal y del Medio Natural hayan encontrado empleo.