La Diputación de León condena la violencia de género en el 25N y promueve distintas acciones de concienciación

La Diputación de León se suma a los actos conmemorativos del Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer que se celebra el miércoles 25 de noviembre y que este año estará marcado por las restricciones que impone la pandemia por COVID. Ante la imposibilidad de concentrarse para la lectura del manifiesto, así como para celebrar cualquier tipo de encuentro público, la institución provincial ha adaptado su programa a las circunstancias actuales sin renunciar a efectuar su más enérgica denuncia a esta lacra de la sociedad que, en lo que va de año, se ha cobrado la vida de 41 mujeres en España, 1.074 mujeres asesinadas desde el año 2003 -el primero del que constan estadísticas- por parte de sus parejas o exparejas.

Desde el Programa de Mujer, enmarcado en el área de Derechos Sociales que dirige la diputada Carolina López, se han programado distintas acciones dirigidas a concienciar y sensibilizar sobre este grave problema que, como ha destacado la diputada, preocupa “todos y cada uno de los días del año”. Tal y como ha recordado, la Diputación de León celebraba hace ahora un año, coincidiendo con el pasado 25N, un acto “para denunciar el silencio en torno a esta lacra y analizar, junto a los distintos sectores que trabajan para combatirla, la forma de mejorar la red de ayuda a estas mujeres”.

En esta ocasión, las circunstancias derivadas de la pandemia por el COVID, “que cabe señalar que ha complicado aún más la situación de estas mujeres que conviven con su maltratador, hace imposible llevar a cabo un acto presencial, pero no impedirá que alcemos la voz en contra de la violencia machista con distintas acciones que, con motivo de este día, se llevarán a cabo, y que se suman al trabajo diario que desde nuestros servicios se presta para contribuir a la lucha contra esta violencia en coordinación con la Gerencia de Servicios Sociales del Gobierno autonómico y la Subdelegación del Gobierno”.

A lo largo de los diez primeros meses de este año, los profesionales de los Equipos de Acción Social en la provincia, siguiendo el Modelo de Atención a Víctimas de Violencia de Género ‘Objetivo Violencia Cero’ impulsado por la Gerencia de Servicios Sociales de la Junta de Castilla y León, ha valorado 179 expedientes de mujeresque han derivado en la aplicación de diferentes prestaciones socialespara atender su situación, entre ellas teleasistencia,apoyo psicológico, acreditación de violencia de género, prestaciones económicas, recursos de alojamiento a través de la  red de asistencia o asesoramiento jurídico.El objetivo es prestar una atención integral a la víctima prestándole una respuesta individualizada, unificada, inmediata, integral y profesionalizada, adecuada a sus necesidades de seguridad y autonomía personal.

Asimismo, se han registrado 45 solicitudes de apoyo psicológico y se ha tramitado el ingreso de 22 mujeres y 19 menores en los distintos centros de acogida que se integran en la Red de Centros de Asistencia de la Gerencia de Servicios Sociales. Estas viviendas tienen por objeto dispensar, por parte de personal especializado, alojamiento seguro y manutención a las mujeres víctimas y, en su caso, a las personas dependientes de ellas, para llevar a cabo su recuperación integral desde los ámbitos psicológico, educativo, sanitario, laboral y jurídico, actuando en coordinación con las entidades competentes y favoreciendo la superación de los efectos de la violencia de todas las personas afectadas.La Diputación apoya económicamente el mantenimiento de estos recursos de acogida con una subvención pública anual de 50.000 euros.

Por otra parte, y con motivo del Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, se han programado distintas acciones que se suman a las que, a lo largo de todo el año se llevan a cabo para la promoción de la igualdad y la prevención de la violencia de género. Estas acciones han sido presentadas por las seis diputadas que forman parte de la corporación provincial en un video que se difundirá a través de las redes sociales y de la página web de la institución.

En este sentido, la Diputación ha contado con la participación de sus trabajadores y trabajadoras para la lectura de un manifiesto, este año en forma de video, en el que rechaza y denuncia una de las más degradantes violaciones de los Derechos Humanos que vive nuestra sociedad, la violencia de género. Asimismo, se difundirán carteles por los distintos Centros de Acción Social de la provincia para llamar la atención sobre este gran problema y solicitar la implicación de toda la ciudadanía en la lucha contra esta lacra.

Además, se tratará de concienciar y sensibilizar a la población a través de una campaña en las redes sociales de la institución que se suma a las acciones organizadas por la ONU y que concluirá el 10 de diciembre, coincidiendo con el Día Internacional de los Derechos Humanos y en consonancia con los Objetivos de Desarrollo Sostenible.

Del mismo modo, se han editado dos dípticos para distribuir en muy distintos puntos con información sobre la detección y prevención de la violencia de género. El primero de ellos está dirigido a las víctimas y a su autoprotección. En él se informa de las múltiples caras que adopta la violencia de género y los distintos recursos de los que disponen las mujeres para solicitar ayuda. El segundo es un díptico encaminado a la prevención y se distribuirá entre todos los agentes sociales del territorio de la provincia.

También en forma de video se tratará de trasladar el conocimiento y el trabajo de los profesionales de los distintos sistemas implicados en la atención a víctimas aportando claves, indicadores y recomendaciones “con la esperanza de que encuentra réplica y llegue a toda la población”, ha concluido la diputada que recalca la implicación de la institución provincial en “la búsqueda de una solución definitiva a esta violación de derechos que degrada a la mujer y que ha costado la vida de tantas mujeres”.

Por otra parte, se ha renovado la pancarta en memoria de las mujeres asesinadas colocada en el balcón de la fachada de la Diputación, un símbolo de denuncia pública y de recuerdo a las víctimas de la violencia de género promovido por la Plataforma contra la Violencia Machista y la institución provincial.