La Policía Local de León pondrá en marcha esta primera semana de agosto, del día 2 al 8, una campaña especial de control y vigilancia de la tasa de alcohol y presencia de drogas en conductores.
El Ayuntamiento de León colabora con la Dirección General de Tráfico con el propósito de reducir en la ciudad los accidentes de tráfico provocados por la conducción de vehículos bajo la influencia de bebidas alcohólicas y drogas, informa a través de un comunicado remitido a Europa Press.
Según datos del Observatorio Europeo para la Seguridad Vial (ERSO), alrededor del 25 por ciento de todas las muertes en carretera en Europa están relacionadas con el alcohol, mientras que, aproximadamente, sólo el uno por ciento del total de kilómetros recorridos son conducidos por personas con 0,5 g/l de alcohol en sangre o más.
A medida que la concentración de alcohol en sangre (BAC) aumenta en el conductor, la tasa de incidencia de accidentes también se incrementa. En comparación con un conductor sobrio, la tasa de incidencia de accidentes en un conductor con una tasa de alcoholemia de 0,8 g/l es 2,7 veces mayor, elevándose a una diferencia 22 veces mayor cuando la tasa asciende a 1,5 g/l.
Con el aumento de la tasa de alcoholemia, no sólo se incrementa la tasa de incidentes, el accidente también se vuelve más grave. Con una tasa de alcoholemia de 1,5 g/l, el riesgo de gravedad mortal es aproximadamente 200 veces mayor que en el caso de conductores que no han ingerido alcohol.
La presente campaña tiene una finalidad preventiva en la que, además de ofrecer información a los conductores sobre los peligros de la ingestión de alcohol durante la conducción, se sancionarán las infracciones que se produzcan.
Se trata de proporcionar a los ciudadanos argumentos que demuestren que el alcohol y las drogas son absolutamente incompatibles con la conducción y que los resultados del consumo de bebidas alcohólicas, tanto en víctimas mortales como en lesiones y daños materiales, son inaceptables para la sociedad, añade el Consistorio.
En la operación colaboran agentes de las Unidades de Tráfico (Utrafic) y de la Unidad Policial de Policía de Barrio (Ubarrio), quienes serán los encargados de realizar controles de alcoholemia en las principales calles de la ciudad para comprobar la tasa de alcohol de los conductores de vehículos.