La asociaciones Amigos del Camino de Künig y Rey Ordoño I han organizado conjuntamente un programa en el que se unen la palabra, la imagen y la música, para explicar la primera guía moderna del Camino de Santiago, publicada en el siglo XV en Estrasburgo, en la que su autor, Herman Künig von Vach, recomienda los mejores trayectos para viajar desde el centro de Europa a Compostela.



El día 8 de agosto, domingo, a las 18,00 horas, el templo parroquial de Villamejil, acoge un acto que cuenta con la intervención de Tomás Álvarez, presidente de la Asociación de Amigos del Camino de Künig, para hablar del viaje del monje alemán, y especialmente su itinerario en la provincia de León. 



Seguidamente se presenta un recital, con la compositora y cantante María José Cordero y el guitarrista Juan José Collado, basado en los trabajos de Juan del Encina, un gran poeta y músico del siglo XV, que justamente habitaba en León en el momento en que Hermann Künig pasaba por esta ciudad.



Desde el día 9 de agosto al 16, se presentará, en horario vespertino y en la Casa del Concejo de Villamejil una exposición con un centenar de obras, destinada a dar a conocer el trayecto del monje alemán. 



La exposición contiene materiales de pintura y escultura, infografías, y elemento relativos a la peregrinación. Entre estos, una gran colección de fotografías de los lugares que recorrió hace más de 500 años el viajero alemán. Entre los autores de las mismas, aparecen Beatriz Álvarez, José Holguera, Pablo Hojas, Cristina Pedreira, Luis Luengo y Oscar Benavides Cordero (Fox). Junto a ellas, se presentan también mapas de hace un siglo donde figuran los viejos caminos, antes de que la Concentración Parcelaria ocasionara el brutal destrozo de muchos viales históricos.



Los materiales expositivos de la casa del Concejo se complementan con un punto de observación, en las afueras del lugar, desde el que se contempla el panorama de los Montes de León, con el “paso sin montañas” descrito por el monje de Vach.



La primera guía moderna del Camino



En el final del siglo XV, el monje alemán Hermann Künig elaboró la primera guía de Viajes a Compostela de concepción moderna. En ella se abandona la filosofía del libro V del Códice Calixtino, centrada en leyendas, milagros y reliquias, para presentar al viajero datos de itinerarios, puentes, peajes, rutas alternativas, divisas y hasta informes de la atención al viajero.



Paralelamente, frente a los datos del Códice Calixtino, que sólo abarcan rutas del centro y mediodía francés, Künig describe las dos grandes vías por las que circula la gran corriente de peregrinación de toda Europa.

La primera es la de Einsiedeln, que recogía el flujo peregrino de parte de Suiza, Bohemia, Baviera, Suabia, Silesia, Austria, Hungría y sur de Polonia; la otra la de Aquisgrán/Colonia, que canalizaba la peregrinación procedente de la costa del Báltico y Escandinavia; la del norte de Alemania, y la que llegaba desde Polonia por Leipzig, Erfurt y Eisenach.



En España, Künig presenta básicamente el itinerario clásico del Camino Francés, con dos importantes variantes, en las provincias de León y Lugo.



En la primera, recomienda un paso fácil que evita las alturas de los Montes de León. Se trata de una ruta que viene desde Trobajo, por Santa Marina del Rey y Benavides para cruzar la Cepeda y alcanzar Cerezal de Tremor y Ponferrada. Por esta vía se llega al Bierzo por una cota de 1100 metros, en lugar de los 1500 de Foncebadón. En Lugo describe otra alternativa que también evita las mayores alturas de las estribaciones de la Sierra del Caurel, encaminando los pasos por Piedrafita, Becerreá y Lugo.



La exposición se centra de forma especial en el entorno del valle del Órbigo y la comarca de la Cepeda, y ha sido realizada en colaboración del Ayuntamiento de Santa Marina del Rey con las Asociaciones Rey Ordoño I y Amigos del Camino de Künig, con aportaciones de otras instituciones y particulares, entre ellas el Museo de los Caminos de la Ciudad de Astorga. 

Los niños también viajaban a Compostela. Calzados infantiles, colección de Benito Escarpizo. Imagen de elcaminodekunig.com