D. Álvarez / ICAL
En el año 2012, la Fundación de los Ferrocarriles Españoles cedió al Ayuntamiento de Toral de Los Vados un antiguo vagón restaurante modelo BR4x-10.804, con cuatro compartimentos para viajeros, que se ubicó en la vía que servía de apartadero a la estación, frente al antiguo almacén de mercancías que hoy funciona como biblioteca municipal. Sin un uso definido desde entonces, el viejo vagón ubicado en vía muerta revive ahora de la mano del equipamiento anexo, convertido en un ‘bibliovagón’ en el que los lectores pueden encontrar una selección de libros de distintas temáticas y disfrutar de las historias contenidas en sus páginas desde el espacio que en su día sirvió de cafetería a los pasajeros del tren Estrella entre Barcelona y Galicia.
Al respecto, la concejala de Cultura de Toral, Eva Martínez, explica que “la idea surge como una pata más de un proyecto de apuesta por el fomento de la lectura”, que se suma al estreno de un punto de intercambio de libros en la playa fluvial o a la tematización literaria de la ruta de senderismo de La Loquia. El uso del vagón como espacio anexo a la biblioteca servirá para rescatar del olvido esta reliquia que en 2016 ya se lavó la cara con la ayuda del grafitero Asier Vera.
De cara al futuro, la edil avanza la intención de organizar un club de lectura en el municipio, que tenga su sede en el ‘bibliovagón’. Este espacio también se concibe como el apropiado para albergar actos culturales como presentaciones de libros, aunque la crisis sanitaria ocasionada por la pandemia de COVID-19 pone en espera todos estos planes que requieren de actividades presenciales.
A bordo del vagón, la bibliotecaria, Montserrat Delgado, explica que los cuatro compartimentos para viajeros funcionan como salas en las que los libros se acumulan de acuerdo con su temática principal. Así, el primero de los compartimentos está dedicado a los amantes de la historia, el segundo a la novela negra y de misterio, el tercero a las historias de aventuras y el último a la literatura romántica. “Si quisieran llevárselo en préstamo, tendrían que pasar por el edificio de la biblioteca”, señala Delgado, que apunta que el nuevo y pintoresco espacio para la lectura estará abierto de lunes a viernes en el mismo horario que la biblioteca, de 10.30 a 13.30 horas.
Apuesta por el fomento de la lectura
Junto a la puesta en marcha del ‘bibliovagón’, el Ayuntamiento lanzó esta semana otra iniciativa encaminada a fomentar la lectura por parte de los vecinos. Se trata de un punto de intercambio de libros instalado en el entorno de la playa fluvial, al lado de las piscinas climatizadas. En esta pequeña cabina de madera, los amantes de la literatura pueden encontrar libros de temática variada, dirigidos tanto al público infantil y juvenil como al adulto.
Con un lote de libros procedente de la biblioteca municipal que sirve de punto de partida para el intercambio, la idea es que cada persona que se lleve un ejemplar, deje en su lugar otro que ya haya leído para permitir que otras personas disfruten de él. “La idea es poner más casetas por el pueblo”, explica la concejala de Cultura, que valora la “buena aceptación” de este primer punto de ‘bookcrossing’ instalado en verano junto al río y la piscina. “Sólo que haya una persona que lo utilice y lo valore, para mí es suficiente”, señala Martínez, que destaca que estas iniciativas no suponen una gran inversión por parte del Consistorio.
Además, el pasado mes de abril el Ayuntamiento puso en marcha un proyecto de tematización literaria en una de las rutas de senderismo que atraviesa el municipio, protagonista de una marcha tradicional cada 23 de abril. Aprovechando la coincidencia con el Día Internacional del Libro, los caminos de este singular paraje se señalizaron con distintos paneles que contienen frases y citas literarias y que quedaron instalados de forma permanente en este espacio natural dedicado al mundo del libro.
Una historia ligada al tren
La vinculación de Toral de los Vados con el ferrocarril se remonta casi un siglo y medio en el tiempo, con la apertura al tráfico de su estación en marzo de 1883. Un siglo más tarde, en 1984, la estación situada en la plaza Mayor del municipio se cerró al tráfico de pasajeros. Sin embargo, los vecinos no olvidaron la influencia que la vía férrea tuvo en el desarrollo del municipio y en 2002 se celebró la primera edición de ‘Toral en tren’, una fiesta que cada primer fin de semana de junio sirve para subirse al tren del pasado y viajar por el tiempo.
La reforma integral de la antigua estación permitió inaugurarla en el año 2010 como centro de interpretación del ferrocarril, con una exposición de material ferroviario y maquetas, y se acompañó con la instalación de un monumento al ferroviario en la plaza. El ambiente ferroviario de este espacio urbano se completó hace unas semanas con el descubrimiento del gigantesco mural elaborado por el artista gráfico David Esteban, más conocido como Da2.0, en homenaje a un pasado ligado a las vías del tren. La apuesta del municipio por el turismo ferroviario continúa teniendo como reto pendiente la recuperación de los nueve kilómetros de tramo de la vieja línea en desuso entre Toral y Villafranca del Bierzo.