Manuel Merillas, actual campeón del mundo de Carreras por Montaña, y Carlos Lozano, presidente de la asociación palentina En Ruta por las Enfermedades Raras, superan un nuevo desafío al coronar los Picos de la Mortera (2.024 m) desde la comarca leonesa de Babia. Un ejemplo de superación, constancia y esfuerzo con el que reivindicar la importancia de la investigación de estas patologías.

Un nuevo logro deportivo y personal. Un éxito más que sumar a los que a lo largo de sus vidas han conseguido el montañero leonés Manuel Merillas y el presidente de la asociación palentina En Ruta por las Enfermedades Raras, Carlos Lozano.

Con el objetivo de dar visibilidad a quienes padecen enfermedades poco frecuentes y poner de manifiesto la importancia que la actividad física y el deporte tiene para este colectivo, el sábado 9 de abril consiguieron coronar en la divisoria entre León y Asturias, una de sus elevaciones más representativas: los Picos de la Mortera (2.024 m).

El desafío, que discurrió en un escenario distinto al habitual ha supuesto un nuevo ejemplo de superación y ha servido, una vez más, para reivindicar el valor de la investigación de estas patologías y demostrar los beneficios que el deporte, pautado por un profesional y adaptado a cada persona, tiene para quienes padecen enfermedades de baja prevalencia.

Se trata del cuarto reto que ambos afrontan juntos y, a tenor de los resultados y de su interés por continuar alzando la voz en pro de la investigación de las enfermedades poco frecuentes para mejorar su diagnóstico y tratamiento, no será el último.

A pesar de las condiciones climatológicas en la zona días antes de la celebración del reto - que sumaron una traba más a superar en esta aventura-, la preparación, el esfuerzo y la confianza en sus posibilidades y capacidades permitieron que el desafío fuera el culmen a un gran trabajo individual que ambos compartieron.

“Planear una actividad de estas características no es fácil, pues hay que hacer frente a situaciones que tienes que controlar y prever, pero siempre existe un modo de hacer cosas y minimizar los riesgos”, asegura el leonés Manuel Merillas.

Los meses previos de preparación han sido claves para el responsable del colectivo palentino, Carlos Lozano, cuya constancia le ha permitido asegurar un nuevo éxito. “Es importante el sacrificio y el esfuerzo, pero también el autoconocimiento y la confianza en profesionales y amigos que saben orientarte para progresar y salvar en cada uno de los retos lo que, en un principio, parece insalvable”.

En este sentido, Lozano argumenta que “muchas veces hay que buscar cómo compensar lo que en un principio, por una limitación, no puedes llegar a conseguir; se trata de encontrar la mejor fórmula para alcanzar el objetivo en función de la capacidad física de cada uno”.

La Pica del Jierru (2.425 m), una de las elevaciones más altas e importantes del Macizo Oriental de Picos de Europa; el Pico Boru (2.129 m), una de las cumbres más míticas del mismo macizo; el emblemático Pico Curavacas (2.524m), la cumbre más alta de toda la provincia de Palencia; y ahora los Picos de la Mortera (2.024 m).

Distintos desafíos que tienen un gran esfuerzo detrás. “En todos ellos, han destacado las ganas de aprender el uno del otro, cada uno desde su faceta, y el afán de ambos por seguir haciendo visible lo invisible, por dar visibilidad a las patologías poco frecuentes y por poner de manifiesto la importancia que la actividad física tiene para la población en general y para el colectivo de personas con enfermedades poco frecuentes en particular”, asegura Carlos Lozano. Todo ello, junto a la importancia de “reivindicar la necesidad de apoyar la investigación de estas patologías, para que se avance en su diagnóstico y tratamiento, desde lo que más nos gusta y más nos une a los dos: la pasión por la montaña”, añade.

Pero, como en la vida, las dificultades también están presentes. “Existe una idea generalizada de que lo más complicado en este tipo de retos es el ascenso hasta la cima, pero en el descenso intervienen muchos factores que condicionan que pueda llegar a ser más duro”, comenta el presidente de En Ruta. Así, Carlos Lozano explica que “la musculatura que implica un descenso en este tipo de retos, no es exactamente la misma que la que interviene en el ascenso y, continuamente debo ir realizando balances musculares compensatorios, lo cual no siempre es fácil pero sí necesario para evitar, por ejemplo, contracturas o sobrecargas.”

A ello se suman “problemas relacionados con el equilibro y la coordinación, así como el nivel de fatiga y cansancio que, lógicamente, no es el mismo al iniciar un reto que al acabarlo. Pese a todo, la preparación previa, y el gran conocimiento y experiencia de Manuel Merillas, han posibilitado que, hasta la fecha, hayamos conseguido superar, con más o menos esfuerzo, todos los desafíos que nos hemos propuesto”, destaca el responsable de la asociación.

Compañerismo y recompensa

Merillas, que sabe lo que significa caerse para volver a levantarse y continuar la carrera sin pensar en abandonar, tiene claro que “lo que da más seguridad siempre es la experiencia y, si estás preparado, ante cualquier problema y sin perderle el respeto a la montaña, no debería pasar nada”.

A esto se une el compañerismo que siempre lleva por bandera y que, tiene claro, es más importante que el hecho de subirse al podio. “Eso no es una elección, es algo que se tiene que hacer; si eliges ganar en vez de ayudar es que algo no va bien en esta sociedad”.

Pero, evidentemente, alcanzar el objetivo, es una satisfacción que compensa. “Detrás de estos proyectos, hay muchas horas de entrenamiento y esfuerzo diario para poder llegar a superarlo, pues retos como los del pasado sábado, así como algunos de los que afrontamos la asociación a lo largo de la temporada, exigen mucho a nivel físico y mental”, asegura Lozano.

“Al alcanzar una cima, son muchas las emociones que a uno le vienen a la cabeza, especialmente las horas de entrenamiento que hay detrás y el gran equipo humano que hace posible que lo soñado se pueda hacer realidad pese a todas las limitaciones y obstáculos que hay que superar a distintos niveles”, añade el presidente de En Ruta.

De igual modo, para el campeón del mundo en la disciplina Skyrunning Trail, el ponerse en ruta una vez más para sumar kilómetros ha sido una nueva experiencia, tanto “por compartir esta vivencia con Carlos”, como “por ayudar a este colectivo en una gran causa”.

Más kilómetros para investigación y conocimiento

Con este logro, los dos montañeros han sumado un nuevo reto deportivo y han dado otro impulso a la investigación de las patologías minoritarias, propósito para el que el colectivo seguirá con su labor de sensibilización y concienciación.

Por ello, quien lo desee puede apoyar esta causa y el desafío que acaban de superar Lozano y Merillas a través del crowdfunding que tiene abierto el colectivo palentino a favor del Programa ‘Investigación y Conocimiento’ de la Federación Española de Enfermedades Raras: https://www.migranodearena.org/reto/en-ruta-por-las-enfermedades-raras-2022.

Al igual que en temporadas pasadas, las aportaciones recibidas ayudarán a seguir sumando fondos para apoyar, junto con otras entidades, la convocatoria anual de ayudas a la investigación de Fundación FEDER, impulsada desde el tejido asociativo y evaluada por el Instituto de Salud Carlos III.