La Consejería de Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación del Territorio de la Junta de Castilla y León, en colaboración con la Consejería de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural, la Diputación de León, Ayuntamientos y Juntas Vecinales de la zona afectada han comenzado, por quinto año consecutivo, las sueltas del parasitoide Torymus sinensis en la provincia de León, casi en su totalidad en la comarca de El Bierzo. Es el tercer año que esta actividad se desarrolla como un Organismo de Control Biológico, con una comercialización regulada.
A medida que la plaga de la avispilla del castaño (Dryocosmus kuriphilus) se ha extendido por los castaños de la Comunidad, se han realizado sueltas del parasitoide, al ser éste el único medio conocido para facilitar el control de la plaga y reducir su fuerte impacto en la producción de fruto del castaño.
En León ya se han realizado sueltas durante 4 años consecutivos. Este año será el quinto en la provincia leonesa. La superficie afectada ha aumentado, por lo que las administraciones implicadas y particulares han colaborado para continuar con la lucha biológica contra la avispilla del castaño.
En los dos años anteriores, la suelta del parasitoide se llevó a cabo en unas circunstancias complicadas, motivadas por la pandemia Covid-19, lo que hizo que se tuvieran que declarar los trabajos de suelta como una actividad esencial. Pese a las dificultades, el resultado final fue satisfactorio.
Durante el presente año, se está comprobando que Torymus sinensis está aumentando sus poblaciones, en aquellas zonas donde se había soltado durante los años anteriores, debido a los estudios realizados al recolectar decenas de miles de agallas para su análisis. De esta manera, se ha verificado que los trabajos se realizan correctamente y que son efectivos.
Sin tener aún los datos definitivos de los controles realizados este año 2022, se constata la presencia del parasitoide en zonas donde ha sido liberado, ampliando de esta manera la superficie colonizada y la densidad de sus poblaciones.
A medida que avance la implantación del parasitoide en los puntos de suelta, se irá expandiendo por su entorno y, según aumenten sus poblaciones, se realizará un control efectivo de la plaga.
La forma de trabajar durante este año será similar a la que se llevó a cabo los pasados años. Se continuará con el Protocolo de suelta del Torymus que se emplea actualmente y gracias a la colaboración y participación directa de personal de Ayuntamientos, Juntas Vecinales y particulares, se podrán realizar las sueltas programadas en el corto espacio de tiempo en el que las condiciones biológicas y meteorológicas marcan como óptimo.
De manera general, los trabajos se organizarán de la siguiente manera:
-El Servicio Territorial de Medio Ambiente de León coordinará la realización de las sueltas. Las Oficinas Comarcales de Medio Ambiente determinarán en qué zonas es adecuada la suelta del parasitoide y en qué época.
-Las Oficinas Comarcales de Medio Ambiente comunicarán a Ayuntamientos, Juntas Vecinales y/o mesa del castaño, las zonas donde es adecuada la realización de la suelta del parasitoide y las dosis asignadas, para que asistan a las sueltas dirigidas por los Agentes Medioambientales, o para que personal autorizado pase a recogerlas.
-Las entregas de las dosis adquiridas por Ayuntamientos y Juntas Vecinales, se realizarán en la Oficinas Comarcales de Medio Ambiente, por parte de Agentes Medioambientales, cumpliéndose todas las medidas de seguridad encaminadas a la protección de la salud de todas las personas que participen en el operativo, y solo a personal debidamente acreditado, firmando un recibí con dosis y puntos de suelta.
En todo caso, será la meteorología y la fenología del castaño y, por ende, la aparición de sus hojas, la que indique el momento de empezar a actuar. Los trabajos de suelta del parasitoide han de hacerse desde el momento en el que las hojas de los castaños empiecen a aparecer y a ser visibles las pequeñas agallas que provoca la larva de la avispilla del castaño.
Los trabajos de suelta deben cumplir con todas las medidas de seguridad que la pandemia COVID-19 obliga, como son la desinfección de manos y del material recibido, el distanciamiento social y el uso de mascarillas.
Asimismo, continúa la campaña de información a particulares y propietarios sobre el estado de los trabajos y las recomendaciones de gestión en los sotos donde se realizan las sueltas del parasitoide. Entre ellas, se recomienda no destruir restos de poda mediante el empleo de fuego para no matar a los ejemplares reproductores y su descendencia.