El PSOE de León, a través del secretario de Desarrollo de las Cuencas Mineras, Antonio García Arias, reclama a la Junta que las subvenciones autorizadas el pasado 2 de junio a través de la Consejería de Industria, Comercio y Empleo, por un valor de 3,6 millones y con el objetivo de promover la creación de puestos de trabajo en 24 municipios de las cuencas mineras de León y 7 de Palencia, priorice a los parados del sector a la hora de valorar los requisitos de las contrataciones, según informa Ical.
Según la nota de prensa enviada a los medios el mismo día en que se autorizaron la subvenciones en el Consejo de Gobierno, la ayuda permitirá a los ayuntamientos beneficiarios financiar parte de los costes salariales y de seguridad social derivados de la contratación de 360 personas inscritas como desempleados en el Servicio Público de Empleo de Castilla y León (Ecyl), aportando un máximo de 10.000 euros por trabajador durante un periodo de 180 días.
En el comunicado sobre esta propuesta incluida en el Plan de Dinamización Económica de los Municipios Mineros de Castilla y León se especifica que los contratos laborales deberán “dirigirse preferentemente a los desempleados excedentes del sector de la minería y, en su ausencia, a los jóvenes menores de 35 años -en particular, sin cualificación-, parados de larga duración y desempleados mayores de 45 años”.
Sin embargo, en la resolución publicada por el Ecyl al día siguiente, la cual recoge la concesión de la subvención directa a los municipios mineros de la comunidad, no se especifica como requisito prioritario para acceder a las contrataciones a los parados procedentes del sector minero, limitándose a señalar a menores de 35 años, mayores de 45 años y desempleados de larga duración, especialmente con cargas familiares, entre los colectivos prioritarios.
“Se trata de unas ayudas para las cuencas mineras pero que excluyen a los mineros”, denuncia García Arias y recuerda que “en la nota de prensa previa a la resolución se hablaba de contar preferentemente con desempleados del sector y, si no los hubiera, cualquier persona, lo que no excluiría a nadie.
Ahora se excluye a los mineros porque se marcan unas franjas de edad que difícilmente cumplen: los menores de 35 años no se dedican a la minería y los mayores de 45 años ya están prejubilados”. “Los desempleados de la minería que hayan leído la nota de prensa no entenderán que en realidad no cumplen con los requisitos de preferencia y, por tanto, no se les va a poder contratar”, lamenta el secretario de Desarrollo de las Cuencas Mineras del PSOE de León.