La Policía Nacional advirtió hoy de la existencia de una modalidad de delito de estafa bancaria de gran impacto económico que vienen sufriendo en el último mes varios clientes de Unicaja de la ciudad de León que reciben SMS en sus móviles con los que los ciberdelincuentes pretenden conseguir las claves de acceso al servicio de banca ‘online’ para suplantar su identidad y desviar dinero a sus cuentas. Según fuentes de la Subdelegación del Gobierno en León, el número de denuncias presentadas en la capital aumentó exponencialmente en las últimas semanas.
De acuerdo con el relato de las mismas fuentes, los estafadores se hacen pasar por la entidad bancaria para contactar con sus víctimas enviándoles un SMS en el cual les informan de que un dispositivo no autorizado se ha conectado a su cuenta bancaria ‘online’ o bien que su cuenta ha sido bloqueada por un acceso fraudulento, según informa la agencia Ical. Para solucionar cualquiera de estas situaciones, el mensaje contiene un enlace que el cliente debe pinchar.
Al hacerlo, las víctimas reciben una llamada telefónica en la que el interlocutor se identifica como personal de atención al cliente para hacer más creíble la estafa. En nombre de la entidad, los estafadores comienzan a solicitar datos personales y claves bancarias de confirmación y una vez facilitadas acceden plenamente las cuentas y se consuma el delito. Según fuentes de la Policía, esta suplantación de identidad de la entidad bancaria es “recurrente y cíclica” y afecta también a otras entidades bancarias.
En ese sentido, la Policía Nacional aconseja tener una especial precaución y desconfiar de todos aquellos SMS o correos procedentes de direcciones desconocidas. Igualmente, recomiendan verificar que nos encontramos en la página auténtica antes de introducir nuestras credenciales en cualquier página web y no acceder a los servicios de banca ‘online’ a requerimiento de ningún mensaje, llamada telefónica o correo recibido.
Igualmente, los agentes recomiendan no facilitar nunca la información personal ni las claves personales de acceso a las cuentas bancarias a terceros y, en caso de duda, contactar directamente con la entidad implicada, con las fuerzas y cuerpos de seguirdad del Estado o con la Oficina de Seguridad del Internauta (OSI) del Instituto Nacional de Ciberseguridad (Incibe).