D. Álvarez / ICAL
Las intensas tormentas de granizo caídas en la tarde de ayer en la comarca del Bierzo dañaron seriamente los cultivos de pera y manzana que se extienden por diferentes localidades. “Es un completo desastre, dan ganas de echarse a llorar”, reconoció el presidente de la Asociación Berciana de Agricultores (ABA), Daniel Franco. Con piedras de más de cinco centímetros de diámetro, un tamaño similar al de una pelota de golf, el impacto en los frutos los deja completamente rotos, cuando faltaba menos de una semana para la recolección. “Ya casi la teníamos en la mano”, lamenta Franco.
De acuerdo con la primera valoración, llevada a cabo durante la mañana de hoy, las parcelas más afectadas por el granizo se encuentran en localidades como Camponaraya, Narayola o Carracedelo, aunque también hay fincas “seriamente afectadas” en zonas como Quilós, Cacabelos y Arganza. Franco adelantó que, ante los daños provocados los agricultores bercianos solicitarán ayudas a la Administración, dada la “buena sintonía” mostrada por el consejero de Agricultura, Gerardo Dueñas, en su reciente visita a la comarca.
A días del inicio de la vendimia
En el ámbito vitivinícola, la tormenta de granizo que descargó principalmente sobre la ciudad de Ponferrada también provocó algunos daños en los viñedos de la localidad de San Lorenzo y en los que se extienden a los pies del monte Pajariel. En una “tarde complicada”, según reconoció el presidente de la Denominación de Origen (DO) Bierzo, Adelino Pérez, las principales afecciones se concentraron en las localidades de Arganza, Quilós y Magaz, donde la piedra provocó “bastantes daños”.
Sin embargo, otras zonas cercanas como Villafranca del Bierzo, Valtuille y Cacabelos consiguieron superar la tormenta sufriendo solamente “daños puntuales”. “No podemos evaluar todavía, hay que esperar a que seque para ver cuántos racimos están afectados”, señaló. Además, “en las zonas donde ha caído sólo lluvia, el agua dará más vigor a la planta”, apuntó Pérez, que confió en que estas precipitaciones ayuden a que la uva incremente su rendimiento cuando llegue el momento de la vendimia.
Aunque muchas bodegas tenían previsto iniciar la recogida de uva este mismo fin de semana, estas precipitaciones de última hora llevarán a muchos viticultores a retrasar el inicio de la vendimia hasta mediados de la semana que viene, en torno al 1 de septiembre.
Afecciones en la ciudad
En la ciudad de Ponferrada, la tormenta provocó inundaciones en varios puntos, como las calles San Valerio, Río Urdiales y Ortega y Gasset, donde tuvo que cortarse el tráfico debido a las balsas de agua, explicaron fuentes del Consistorio de la capital berciana. Además, el Ayuntamiento solicitó a la empresa encargada de la limpieza viaria que controlase los drenajes de las calles Río Valcarcel y Hermanos Pinzón y de las avenidas del Sil y de las Huertas del Sacramento.