La antigua escuela de Los Barrios de Luna (León) alberga desde hace 25 años el Museo del pastor. El recinto se ofrece al público como testimonio directo de un oficio milenario que necesariamente es un modo de vida. Fue en septiembre de 1997 cuando abrió sus puertas, coincidiendo con la Fiesta del Pastor que cada año se celebra en la localidad el segundo domingo de septiembre y que cumple su edición número 45, tras dos años de ausencia obligada por la pandemia.

El rehabilitado edifico de piedra abriga unas instalaciones que para el visitante se dividen en dos espacios principales: una sala de audiovisuales que acoge una colección de fotografías relacionadas con el pastoreo en la planta baja y la sala estrictamente expositiva en la superior.

Las donaciones y las cesiones temporales e indefinidas conforman el grueso del material que se expone y que incluye vestimentas, aperos y utensilios que acercan a quien los observa a la realidad de un trabajo que desempeñaron muchos habitantes de la zona, donde la ganadería ovina tuvo un gran protagonismo.

Los objetos utilizados para trabajar la lana también tiene su espacio en este lugar que conoce bien el alcalde, Jesús Darío Suárez, casi sorprendido de que se cumpla ya el primer cuarto de siglo de una iniciativa que, recuerda, comenzó “haciendo una exposición en el Ayuntamiento y derivó poco a poco para tener este museo, pequeño, pero que es un buen compendio y recoge bien la vida del pastor”.

“En la zona de Luna y de Babia todo giraba en torno al pastoreo, a la ganadería, sobre todo de ovino y caprino; era la base de la economía y aquí todavía hoy es donde más ganado ovino hay de toda la provincia, aunque tenga mucha menos presencia”, apunta.

El Museo del Pastor es uno de los atractivos turísticos del entorno, del que también destaca el regidor el Museo de la Vida en el Cámbrico, de Miñera de Luna. Como buen embajador de su tierra, afirma que el que no la conozca “tiene delito, porque tenemos de todo, naturaleza, sol y agua y no le va a defraudar”.

Es también el museo que hoy cumple cinco lustros un complemento perfecto para la Fiesta del Pastor que cada año se celebra al abrigo del pantano de Luna, que este verano ha ofrecido una de sus estampas más reducidas de los últimos años en volumen de agua. Precisamente abrió sus puertas coincidiendo con la celebración anual que se repite cada segundo domingo de septiembre para rendir homenaje a un colectivo que es todavía una de las señas de identidad de esta zona de la montaña leonesa.

“Hay que mantener la tradición de la fiesta para ensalzar la figura del pastoreo”, recalca el alcalde que encabeza la comisión de honor del encuentro junto al presidente de la Diputación, Eduardo Morán, y el presidente de la Sociedad Canina Leonesa, Vicente González.

El programa festivo de la jornada incluye exposición de ganado, concurso de mastines, de ganado ovino y caprino de montaña y de pastores ataviados a la antigua usanza, misa y dulzaineros. También acoge la entrega del premio Ganadero Emprendedor, que otorga la Fundación VistaLinda, con sede en Auckland (Nueva Zelanda) y que este año se entrega a Gregorio Fidalgo Tejedor, de Abelgas.

La Fiesta del Pastor, que celebra su edición número 45, recibió en febrero de 2014 de la Diputación de León la declaración de Interés Turístico Provincial, con carácter definitivo, y conforme a la convocatoria de 2013.

La mayor distinción del encuentro es el título de Pastor Mayor de los Montes de Luna, acompañado de sus rabadanes -Ruperto Rodríguez de La Vega de Robledo y Benilde Suárez, de Abelgas de Luna-, que este año recae en el presidente de la Academia de las Ciencias Veterinarias de Castilla y León, Elías Rodríguez Ferri. “Es una personalidad en la materia y méritos tiene más que suficientes” resume el alcalde sobre la elección que alcanza ya a 47 personas -43 hombres y tres mujeres- desde la primera Fiesta del Pastor celebrada en 1970.