Una indemnización de 15.000 euros. Eso deberá pagar tras la condena de un juzgado la Junta de Castilla y León a una enfermera interina que trabajaba en una residencia que depende de la Gerencia de Servicios Sociales en la provincia de León y fue cesada por ser considerada indefinida no fija.
La sanitaria fue despedida el pasado 29 de enero, después de más de ocho años prestando sus servicios en un centro que depende de la Gerencia Territorial de Servicios Sociales de León, para lo que alegaron la incorporación de una enfermera laboral fija que había superado el proceso selectivo convocado durante el mes de diciembre de 2019.
El Sindicato de Enfermería de León ha detallado a la agencia Ical que desde sus servicios jurídicos demandaron en los tribunales que la sanitaria interina, junto a otras que estaban en su misma situación, viera reconocida de su condición de indefinida no fija, lo que se traduce en una indemnización en caso de despido.
De esta manera, la enfermera afectada ha logrado ser indemnizada con 15.000 euros tras ser considera indefinida no fija, algo que Satse León ha valorado "muy positivamente", a la vez que está a la espera que se resuelva con el mismo final la situación de algunas enfermeras más que están en idénticas condiciones, por lo que también interpusieron denuncias para conseguir que su relación laboral con la Gerencia de Servicios Sociales fuera denominada como indefinida no fija.