Agentes de la Policía Nacional de la Comisaría de Ponferrada han detenido a dos hombres de 51 y 39 años de edad como presuntos autores de un delito de estafa a una persona de avanzada edad.
La Comisaría de Ponferrada, en colaboración con la Policía Nacional de Oviedo, ubicaba en Ponferrada a dos hombres que, en ocasiones anteriores, habían sido investigados por hechos similares.
Los detenidos se dedicarían, de forma itinerante y por todo el territorio nacional, a estafar a mayores a los que llamaban por teléfono haciéndose pasar por un mando policial, diciéndoles que un hijo suyo había tenido un accidente y había atropellado a una mujer embarazada que habría fallecido y para evitar su ingreso en prisión, deberían entregar 20.000 o 30.000 euros.
Se ganaban la credibilidad de las víctimas facilitándoles datos sobre el familiar. En ocasiones datos casuales. Cuando ganaban esa confianza, el interlocutor les respondía, ante la imposibilidad de recaudar tanto dinero, que ya había hablado con el fiscal y que sería suficiente que entregara todo el dinero y, también, las joyas de casa.
La victima de Ponferrada, al recibir la llamada ante la gravedad de la noticia recibida y la urgencia que imprimen estos falsos agentes que no le dejan margen de tiempo para reaccionar ante la premura con la que debe intervenir para salvar a su hijo, aceptó entregar las joyas que tiene en el domicilio y todo el dinero que puede reunir, en concreto 2.985 euros.
Los estafadores para dar credibilidad a la historia se hicieron pasar por su hijo, con el que llega a hablar por teléfono la víctima, simulando una crisis de ansiedad. Le hablaron balbuceando y manifestando que tiene una herida en la boca y por eso no habla bien, todo ello para que no pueda reconocerle la voz y le ruega que facilite el dinero para evitar que entre en la cárcel.
Con todo ello, consiguieron que la víctima acuerde con los estafadores que la entrega se hará el portal del edificio y allí se acercaría un mensajero al que tenía que hacer entrega del dinero y todas las joyas que tenía en casa. El falso mensajero no duda en utilizar incluso una peluca cuando llega al portal para evitar que en un futuro pueda reconocerle cuando se percate de la estafa.
Tras diversas gestiones se ubicó en la ciudad de Ponferrada primeramente a uno de los autores y, acto seguido, al segundo estafador y gracias a la premura con la que se llevó a cabo el operativo de rastreo y localización, se pudieron recuperar todas las joyas y el montante económico que en su momento les había entregado la víctima y del cual aún no les había dado tiempo a deshacerse para evitar que se les relacionara con el hecho.
Una vez finalizadas las diligencias los presuntos autores, a los cuales les constaban así mismo vigentes dos reclamaciones Judiciales, fueron puestos a disposición del Juzgado de Guardia de Ponferrada.