Las concentraciones de los trabajadores del Centro de Tratamiento de Denuncias Automatizadas de León apuntan a no tener fin, por el momento. Así lo han notificado desde la Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) a través de un comunicado, donde han avanzado que de no haber acuerdo laboral, las movilizaciones continuarán.
Los empleados, que gestionan el servicio telefónico de atención al ciudadano (el 060) y diversas tareas externalizadas de la Dirección General de Tráfico (DGT), se han vuelto a reunir este viernes, 12 de enero, en una nueva jornada de huelga con manifestaciones en el exterior de las instalaciones.
Exigen un nuevo convenio y una subida salarial del 30% que se aplique durante la vigencia del acuerdo laboral que se rubrique y que, según piden, debe ser de tres años. La presidenta del comité de empresa, Sara Rebollo, perteneciente a CSIF, señaló este pasado jueves que durante la reunión con el subdelegado del Gobierno en León, este se comprometió a mediar con el delegado en la Comunidad, Nicanor Sen, con el que tienen una "cita pendiente".
Rebollo ha recordado que la adjudicataria, la UTE Centro Estrada, depende de la DGT, que pertenece al Ministerio del Interior, siendo uno de los socios de la UTE la tecnológica Indra, cuyo accionista principal es la SEPI. Estos son los "motivos" por los que el Gobierno central "no puede desentenderse del conflicto laboral".
La sindicalista ha recalcado que la UTE es consciente de que sus reclamaciones "no son ningún disparate" y ha añadido que casi todos de los 270 empleados, que pertenecen a las categorías de operadores y digitalizadores, están cobrando el SMI, perdiendo un poder adquisitivo en los últimos años del "20%".
Desde CSIF han incidido en que se ha renovado el contrato con las tres multinacionales que forman la UTE Centro Estrada por valor de 83 millones, lo que supone una subida del 45% del presupuesto que "también tiene que servir para mejorar las condiciones laborales de los trabajadores".
El pasado 3 de enero se celebró una segunda reunión en el SERLA que acabó sin avenencia, por lo que el comité plantea continuar con las movilizaciones y huelgas, "si la empresa no llama para negociar". El pasado 8 de enero los trabajadores realizaron una marcha desde las instalaciones del centro, en el polígono Onzonilla de León, hasta la Jefatura Provincial de Tráfico de la capital leonesa al grito "DGT, implícate".