La Agrupación de los Cuerpos de la Administración de Instituciones Penitenciarias, ACAIP, denunció hoy el “deterioro de la sanidad penitenciaria” en el centro penitenciario de Mansilla de las Mulas, en la provincia de León, donde, según los últimos datos del portal de transparencia, “existen cuatro facultativos para atender a una población reclusa de 893 presos”, a pesar de que, según la Relación de Puestos de Trabajo, deberían ser diez, lo que supone “un déficit de facultativos del 60 por ciento”.
El sindicato aseguró en un comunicado que la primera consecuencia de este “déficit de atención primaria” en la prisión de León es “el aumento del número de salidas para asistencia sanitaria en el exterior”, lo que “consume gran cantidad de recursos”, ya que requieren de “coordinación de la prisión con los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado”, así como “su priorización frente a la de la población en general”.
La falta de facultativos también se traduce, según ACAIP, en “problemas en el interior de los centros”, donde “más del 30 por ciento de los reclusos sufre algún tipo de patología mental”. Asimismo, la ausencia de una atención adecuada provoca “incidentes regimentales e incumplimiento de sanciones al no poder ser evaluada la situación clínica del reo por la falta de médico”.
Desde ACAIP exigieron que se aporten soluciones “tanto desde el Gobierno central como desde las distintas autonomías, que deberían haber asumido las competencias sanitarias tal y como promulga la Ley de Cohesión sanitaria de 2003”.
En este sentido, el sindicato recuerda que trasladó en febrero al delegado del Gobierno en Castilla y León, Nicanor Sen, las carencias que en materia sanitaria existente en las cárceles de la Comunidad y particularmente en la de León y le instó a “sumir el compromiso que la administración tiene con los centros penitenciarios en materias sanitaria”, lo que “se solucionaría con el traspaso de las competencias sanitarias de las prisiones a la Junta de Castilla y León”.
Asimismo, el sindicato solicitó el pasado dos agosto una reunión al nuevo subdelegado del Gobierno en León, Héctor Alaiz, para trasladarle, entre otros, los problemas sanitarios existentes, aunque hoy está “a la espera de un encuentro”.