El Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León (TSJCyL) trasladará al Consejo General del Poder Judicial y al ministerio de Justicia las "carencias" que existen en las dependencias del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción 6 de Palencia (competente en Violencia sobre la Mujer) que hacen posible la coincidencia de la víctima con el presunto agresor durante la fase de instrucción.

Según ha comunicado el propio TSJCyL, así lo ha aprobado la sala de Gobierno tras recibir un "informa detallado" de la titular del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción 6 (Violencia sobre la Mujer) acerca de las "deficiencias de distribución y diseño" de las instalaciones judiciales.

En concreto, el documento de la juez refleja las "grandes deficiencias de distribución de espacios y de diseño que difícilmente se adaptan a las necesidades del partido judicial de Palencia".

"El público espera en los pasillos contiguos a los despachos de jueces hasta ser llamados", lo que provoca que, en las puertas del titular del Juzgado 6 y del Juzgado la gente espere para tramitar las diligencias "con la consiguiente falta de tranquilidad para que el juez estudie y desarrolle su labor".

"No existe una zona de espera de los investigados, testigos, perjudicados que deben acudir a realizar diligencias de instrucción", recalca.

Asimismo, se explica que la sala prevista en el Juzgado de Violencia sobre la Mujer para la espera de las víctimas se encuentra totalmente aislada. "Sin embargo para acceder a dicha sala, se debe pasar por delante de todas las personas que están esperando a juicio, que pueden ser perfectamente los familiares del supuesto agresor".

Por otro lado, si el investigado por un asunto de violencia de género se halla detenido, es custodiado por la Policía "en un cuarto contiguo al de las víctimas con acceso directo a la Sala de Vistas pero sin comunicación con la oficina judicial". Y si no está detenido, "esperará para realizar las diligencias bien en la zona de espera del público en general por donde debe necesariamente pasar la víctima para esperar en la sala asignada, o bien en la puerta del juez del Juzgado 6 o del 5 para ser llamado por la oficina judicial y por donde también tiene que pasar la víctima".

Por último, también se denuncia que "si el detenido por violencia de género es puesto en libertad, tiene que ir a la oficina judicial para ser notificado o realizar las diferentes diligencias con lo que el encuentro con la víctima es casi inevitable".