Agentes de la Policía Local y Nacional de Palencia desalojaron el pasado sábado, a las 20.24 horas, a un total de 170 personas que se encontraban en las terrazas de la zona de ocio del Seminario tras incumplir el aforo autorizado por la administración municipal. La mayoría de los establecimientos procedieron al cierre voluntario de sus locales y fueron propuestos para sanción por "infracción muy grave" a todos los identificados como responsables de los establecimientos abiertos, a causa del "peligro para la salud pública" que constituye esa zona de ocio, según el parte de sucesos.
Entre las infracciones, los efectivos policiales constataron que la zona de ocio carecía de control de accesos al recinto, tal y como se habían comprometido con la autoridad municipal. De la misma forma, una hora antes, los efectivos tuvieron que intervenir en un establecimiento hostelero de la calle Rizarzuela, donde se localizó a un total de 78 personas en su interior, superando el aforo máximo establecido actualmente para este establecimiento.
Además, se observó que la mayoría de los clientes, menores de edad, se encontraban consumiendo bebidas alcohólicas que dijeron haber adquirido en el citado establecimiento, procediendo a su identificación. Por ello, se solicitó diversa documentación relativa al local, aunque la encargada dijo no tenerla. De esta forma, los funcionarios formularon diversas denuncias, entre ellas las correspondientes al exceso de aforo y la venta de alcohol a menores de 18 años.
Dentro del capítulo sancionador por incumplimiento de las restricciones a causa de la pandemia, el pasado jueves, 24 de diciembre, una patrulla identificó a dos jóvenes que estaban en la terraza de un establecimiento hostelero de la calle Panaderas, los cuales consumían bebidas alcohólicas pese a ser menores de edad. Por este motivo, se propuso para sanción al encargado del local, quien reconoció haber servido alcohol a menores.
En esa misma tarde, horas antes de la celebración de la cena de Nochebuena, el Servicio de Emergencias 1-1-2 comunicó que en un establecimiento hostelero de la calle Juan de Castilla había personas bailando sin mascarilla. A la llegada de los efectivos policiales, se comprobó que estaban las puertas abiertas con la música a un alto volumen, además de localizar a cinco clientes consumiendo en la barra del bar. Se procedió a proponer para sanción por tener las puertas abiertas del local y consumo en barra al encargado del local, y a las cinco personas por estar bailando sin mascarilla ni guardar la distancia de seguridad.
Por último, en el día de ayer, tras una denuncia ciudadana, agentes de la Policía Local se desplazaron a un bar de la avenida Derechos Humanos, donde se comprobó que la terraza se encontraba completamente cerrada y con gran cantidad de clientes en su interior, al contabilizar a 38 clientes consumiendo y sin mantenerse las oportunas distancias de seguridad interpersonal reglamentarias.
Los funcionarios identificaron al titular del establecimiento, siendo informado de que se le iba a proponer para sanción por el cerramiento, la instalación de más veladores de los autorizados y por el exceso de aforo pudiéndose causar un grave riesgo para la seguridad y salud de las personas, según el parte de sucesos del Ayuntamiento.