El complejo monumental del Monasterio de San Zoilo, en la localidad palentina de Carrión de los Condes, que incluye el Templo y el Claustro, ambos bienes propiedad de la Diócesis de Palencia, es un lugar cargado de significaciones históricas, culturales y artísticas y se caracteriza por ser cuna de la expansión de la reforma cluniacense en los reinos de Castilla y León, con una profunda significación jacobea.
Ha experimentado en los últimos años un proceso de recuperación arquitectónica, gracias al esfuerzo técnico y presupuestario de la Consejería de Cultura y Turismo, que ha invertido más de 700.000 euros en actuaciones en la torre campanario y en la zona de la Galilea, junto a la restauración de las magníficas telas medievales del Monasterio descubiertas en 2003, piezas únicas en toda España, que fueron declaradas Bien de Interés Cultural. Unido a estas restauraciones ha ido la iniciativa privada de la industria hostelera palentina, ofreciendo a este bien una gestión y uso que ejemplifican la unión de cultura y turismo, clave para el desarrollo territorial en la Comunidad.
Como continuación de estas actuaciones se está acometiendo una intervención en la cubierta del claustro del Monasterio, que cuenta con un presupuesto de 60.000 euros. Para ello, se está llevando a cabo la reconstrucción de la cobertura de las mismas, así como de su capa de impermeabilización, para la correcta recogida y evacuación de las aguas pluviales. Con esto también se logrará recuperar la estética del alero del claustro original.
En el transcurso de la intervención se ha llevado a cabo un control arqueológico del movimiento de tierras y ejecución de nuevas canalizaciones en el claustro. Al excavar han aparecido dos sepulturas y las cimentaciones del claustro románico en los lados Oeste y Norte del actual. Para constatar este hecho se personaron en el lugar el delegado diocesano de Patrimonio Cultural y Artístico de la Diócesis de Palencia, así como miembros del Servicio Territorial de Cultura de la Junta de Castilla y León en Palencia, y el gerente de Hospederías San Zoilo para visualizar y evaluar el alcance del descubrimiento y comenzar a fijar el procedimiento a seguir.
Su destino
Se están excavando las tumbas para documentarlas y mantenerlas in situ, con una protección reversible que no condene las decisiones que se puedan adoptar en el futuro. También se ha podido documentar el espacio por donde se empezó a desmontar el claustro románico y a construir el actual del siglo XVI, ya que para las cimentaciones del actual se utilizaron las piezas desmontadas del claustro románico. Hasta el momento se han documentado cinco capiteles, fustes de columnas, dovelas, canecillos, dentro de las cimentaciones. Los técnicos están estudiando cuál es la mejor decisión sobre las piezas arqueológicas aparecidas del antiguo claustro románico. En todo caso, si se opta por la extracción, es preciso un nuevo un proyecto que deberá ser autorizado por la Consejería y, posteriormente, decidir el destino de las mismas.
En cualquier caso, todas estas actuaciones de recuperación del conjunto monumental contribuyen a potenciar este recurso turístico, precisamente en este Año Jacobeo y en el camino iniciado recientemente para el reconocimiento de Cluny como Patrimonio Mundial por la UNESCO.