En 2008, la Azucarera de Venta de Baños cerró definitivamente. Sin embargo, a

día de hoy, y pese al desmantelamiento y demolición de sus principales instalaciones,

en los terrenos donde esta se ubicaba, aún permanecen cascotes, gravas, taques de

combustible, depósitos de melazas y vinazas y otros residuos derivados de su

producción. Algo que, como asevera el alcalde de la localidad cerrateña, José Mª López

Acero, “en determinadas temporadas del año, genera fuertes e incomodos olores para

todos los vecinos; además de un desagradable impacto visual”.

Tras la definitiva desaparición de la empresa, los terrenos fueron vendidos a

fondos inmobiliarios y por parte del Ayuntamiento de Venta de Baños se implementaron los pertinentes instrumentos de planeamiento urbanístico para la urbanización de estas parcelas. Una urbanización que, en cualquier caso, se encuentra supeditada a la adecuada descontaminación de estas fincas y que debe realizarse por sus mismos propietarios.

Asimismo, por parte del Consistorio venteño, debido a los problemas que

generan estos residuos, también se intentó ejecutar esta limpieza mediante diferentes

fórmulas. Llegándose a firmar, en 2016, un convenio con la Junta de Castilla y León,

quien cofinanciaría esta actuación pública. Algo que fracasó debido al reducido

presupuesto con el que se contaba.

En la actualidad, tras el cambio del sistema de gestión urbanística y constituirse

los propietarios de los terrenos en Junta de Compensación, y después de que el

Ayuntamiento dictara una orden de ejecución para este fin contra ellos y la prorrogara

hasta el mes de agosto de este año; la primera fase de estas obras de descontaminación va a comenzar inmediatamente: este próximo lunes, 30 de mayo.

“Pese a que debería haberse producido mucho antes, el comienzo de estas

obras es una noticia muy positiva para la calidad de vida del municipio”, afirma López

Acero. Quien, además, considera que el trabajo que se ha realizado durante estos años

por el Ayuntamiento de Venta de Baños, ha sido determinante para que la limpieza de

los terrenos de la antigua Azucarera vaya a ser una realidad.

La primera fase de estas obras consistirá en retirar todos residuos superficiales

y previsiblemente finalizará a finales de julio. Y, en la segunda fase, se analizará el suelo y, en caso de que estuviera contaminado, se sanearía este en profundidad.

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