El Grupo Municipal de Vox ha expulsado este viernes al concejal Ricardo Carrancio, condenado por golpear e insultar a una persona con discapacidad, a la que llamó "puto cojo", según han confirmado fuentes del partido a EL ESPAÑOL de Castilla y León. "Tenemos que exigir comportamientos ejemplares", han asegurado desde el partido. Estas mismas fuentes han señalado que la expulsión de Carrancio del Grupo Municipal se ha formalizado este viernes aunque continuará como edil independiente en el Consistorio.

Los hechos sucedieron en el mes de abril de 2023 cuando el ya exconcejal de Vox se encontraba paseando con su perro por un parque de Palencia. En ese momento, se acerco a él un hombre con discapacidad y movilidad reducida que llevaba a su perro suelto y Carrancio le increpó y le llamó "puto cojo", golpeándole en el pecho y recriminándole que llevara a su perro suelto.

Según se señala en la sentencia, que Carrancio aún puede recurrir, el exconcejal de Vox habría actuado "molesto o enfadado" porque el hombre llevaba a su perro sin atar, le golpeó con la mano "sin causarle lesiones" y le llamó "cojo de los cojones". La expulsión formal del concejal llega solo un día después de que saliese adelante una moción presentada por Izquierda Unida-Podemos para reprobar a Carrancio. Una iniciativa que contó con el apoyo del PSOE y la abstención del PP y de Vox, que, aunque censuró el comportamiento de su ya exconcejal se negó a votar de forma favorable a una moción presentada por la izquierda.

"No vamos a votar a favor, porque sinceramente, con todo lo que está pasando en España de indignidad de tantos y tantos cargos públicos del PSOE , lo suyo es de tercera división. Pero tampoco podemos votar en contra, porque conductas como la que ha manifestado son inadecuadas para un representante de los ciudadanos", aseguró el Grupo Municipal de Vox en el debate de la iniciativa. 

La formación señaló que Carrancio había puesto al partido "ante una situación muy desagradable" y le ha recriminado que no "pidiese perdón" tras sus actos. "Cualquiera puede salir a la calle de mal talante después de una discusión con la pareja, un problema con los hijos, o un disgusto en el trabajo. Pero eso no legitima a nadie para mantener una conducta agresiva y terminar cometiendo un delito leve de maltrato de obra a un convecino", afirmaron desde el partido.

Desde Vox aseguraron que, a pesar de ello, "uno puede recapacitar, arrepentirse y pedir perdón" pero lamentaron que Carrancio "optó por tirar para delante". La formación calificó la actitud del exconcejal como "impropia de un cargo público y totalmente inadecuada para representar a los palentinos y a Vox". Por ello, por su "deslealtad, engaño, uso de la mentira, instrumentalización del Grupo Municipal en su beneficio, traición, falta de compañerismo y desprecio" solicitar a Carrancio que abandonase "de forma inmediata" el Grupo Municipal para "evitarle la indignidad de tener que ser expulsado".

Finalmente, esa expulsión se ha terminado consumando este viernes y Carrancio continuará como concejal independiente en el Ayuntamiento de Palencia.