Situación, como mínimo, rocambolesca y surrealista la que vivieron unos agentes de la Policía Local de Palencia durante la tarde de este pasado lunes, a eso de las 18.36 horas, en la Avenida de Madrid de la capital. Durante un control a un conductor de 43 años, este dio positivo en cocaína y opiáceos, por lo que fue denunciado administrativamente. Pero es que esto no acaba aquí y el episodio se tornó más inverosímil aún.

Ante la imposibilidad de poder continuar circulando, en el lugar se personaron otros dos conductores, una mujer y un varón, para hacerse cargo del vehículo. La sorpresa vino cuando la mujer dio positivo también en cocaína y opiáceos, pero, además, el varón hizo lo propio en cocaína, metanfetamina y opiáceos.

Este último, para más inri, fue también denunciado administrativamente al personarse en el lugar conduciendo otro vehículo. 

Finalmente, el vehículo del primero fue retirado por el servicio municipal de grúa al no haber ningún conductor habilitado para hacerse cargo del mismo, según se relata en el parte de sucesos al que ha tenido acceso este periódico.