Esta es la iglesia más antigua de Palencia: es visigoda, su origen se vincula a una leyenda y tiene más de 1.300 años
Este templo, que es Bien de Interés Cultural desde 1897, es considerado el más antiguo de España
16 julio, 2024 07:00Castilla y León cuenta con un ingente patrimonio arquitectónico fruto de su milenaria historia y gran parte del mismo es de origen religioso, debido a la vinculación de la Comunidad con el Camino de Santiago, que atraviesa el norte de la misma. El paso de la Ruta Jacobea por tierras castellanas y leonesas se deja ver en la gran cantidad de templos románicos que recorren el territorio de provincias como Palencia y Burgos y que han sido testigos del devenir del tiempo.
Pero en el territorio de la Comunidad no es tan habitual la presencia de monumentos de origen visigodo, ya que la mayor parte se han perdido con el paso del tiempo. No es el caso de la basílica de San Juan de Baños, considerada la iglesia más antigua de la provincia de Palencia y la más antigua de España, y que fue mandada construir por el rey visigodo Recesvinto en el año 661, contando, por tanto, con nada menos que 1.363 años de antigüedad.
La basílica de San Juan de Baños se encuentra ubicada en el casco urbano de la localidad de Baños de Cerrato, que pertenece al término municipal de Venta de Baños, en la comarca palentina de Cerrato. Se encuentra situada en un paraje llano de la vega del río Pisuerga, cerca de su confluencia con el río Carrión, en una zona que era conocida por su abundancia de cereales, algo que llevó a los romanos a construir villas importantes en la zona y, posteriormente, a los visigodos a aprovechar esas tierras.
El templo, que fue declarado Monumento Nacional en el año 1897, representa un claro ejemplo de fusión de la cultura visigoda en la dualidad hispanorromana y germánica y se trata del edificio más significativo de la arquitectura religiosa del reino hispanovisigodo.
Una iglesia vinculada a una leyenda milenaria
Considerada como la iglesia más antigua de España que se encuentra en pie, fue construida y consagrada en el año 661, como atestigua la lápida que se conserva en el arco triunfal del templo. Su edificación se encuentra vinculada a la voluntad del monarca visigodo Recesvinto, que, según la tradición, tras aliviar sus problemas nefríticos en las aguas de su manantial, decidió consagrar un templo a San Juan Bautista en agradecimiento. Así relata la leyenda la tradición:
"Regresaba el rey godo Recesvinto, de haber derrotado al caudillo de los vascones, llamado Fruela, y en este pueblecillo se detuvo a descansar, pues se sentía enfermo de una afección renal. Durante este reposo bebió el agua de un manantial existente en el mismo lugar donde anteriormente existieron unas termas romanas y el recuperar rápidamente su salud se lo atribuyó a un hecho milagroso. Como gratitud decidió erigir en aquel lugar el templo que hoy vemos dedicado a San Juan Bautista".
La iglesia es de planta basilical con tres naves y tres ábsides, la impresionante puerta exterior es un gran ejemplo de arquitectura visigoda, con un gran arco de herradura, el extradós de las dovelas no sigue paralelo al intradós y su espesor es de tipo irregular.
En la clave se encuentra tallada la Cruz de Malta con un clipeus, un pequeño escudo con el busto de un dios o personaje, labrada con cuadrifolias simétricas evocando el trabajo de orfebrería que caracterizaba a los visigodos. La decoración de las impostas y del extradós de las dovelas cuenta con un dibujo idéntico, basado en círculos secantes, al que tiene la corona de Recesvinto del Tesoro de Guarrazar.
En el interior del templo, se pueden observar los arcos visigodos sobre columnas de mármol reutilizadas, con los capiteles ocre amarillo pastel que contrastan junto a los sillares de los muros. Solo un capitel es auténtico corintio romano, el resto son imitaciones que se hicieron en época visigoda. Además, se puede observar una lápida de consagración con el nombre del donante y la fecha de la fundación:
"Precursor del señor, mártir Juan Bautista posee esta casa, construida como don eterno la cual, yo mismo, Recesvinto rey, devoto y amador de tu nombre, te dediqué, por derecho propio, en el año tercero, después del décimo como compañero ínclito del reino. En la Era seiscientos noventa y nueve".
Modificaciones a lo largo de su historia
El templo ha sufrido una gran cantidad de modificaciones a lo largo de sus 13 siglos de historia. En su origen, los muros se construyeron con sillares de piedra bien escuadrados y, en su interior, se reutilizaron restos de edificios romanos de la zona, como capiteles y los fustes de las columnas. Además, se emplea el arco de herradura, con el canon visigodo. La cabecera original contaba con forma de tridente y tenía tres capillas separadas entre sí por espacios intermedios, aunque se vio modificada en el siglo XIV.
Los huecos intermedios se convirtieron en dos nuevas capillas y dieron lugar a una cabecera con cinco espacios. Con el tiempo, desaparecieron los muros más exteriores y se dio lugar a la estructura actual.
La ornamentación escultórica del templo es clásica, tradicional y austera, y, de los ocho capiteles que alberga su interior, seis de ellos están esculpidos en tradición romana. En el año 1974 se recuperó el rito hispanovisigodo mozárabe, como una fiesta de larga tradición e historia, y se celebra de forma anual el 24 de junio, incluyéndose dentro de las Fiestas de San Juan Bautista. Una iglesia milenaria que es la más antigua de la provincia de Palencia y también de España.