La inspección de un establecimiento hostelero el pasado sábado en Palencia acabó con hasta tres denuncias para el encargado por dejar consumir sustancias estupefacientes dentro del local y permitir a menores de edad jugar a las máquinas tragaperras.

Los hechos sucedieron el pasado sábado a las 20:39 horas de un establecimiento hostelero de la calle Rizarzuela. Además de por los hechos mencionados, el encargado también fue denunciado por la ausencia de un limitador de sonido.

Dentro de la inspección, además, la unidad canina de la Policía Local de Palencia encontró en la papelera del baño un trozo de hachís que pesaba más de 56 gramos, pareciendo que está dispuesto para su venta al menudeo.

Es por ello que los agentes procedieron al arresto de la persona que lo había arrojado, un joven de 26 años, autor de un presunto delito contra la salud Pública, según se expone en el parte policial al que ha tenido acceso ese periódico.

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