La magia de Würzburg derrota a un gigante como UMMC Ekaterinburg
Cuando pones el corazón, cuando crees en lo que haces, detenerte es complicado. Al corazón no le vencen los millones ni el talento, y esto es aplicable a cualquier equipo (rivales y propios) y hoy el corazón, la MAGIA de Würzburg ha vuelto a derrotar a un gigante como UMMC Ekaterinburg. El resultado lo dice todo, 56-43, sí, 43. Se ha dejado en 43 a un equipo de megaestrellas porque todas las azulonas han creído que eso era posible. Desde el corazón y los "ovarios" de ellas a la garganta de un pabellón entregado. Otro día para recordar este 18 de octubre. Claro, si hablamos de corazón, a Givens la derrotan pocas en el mundo, se comió literalmente a Taurasi desquiciada y, además, se exhibió al contraataque. La mejor en un día en que destacar sólo a una, quizás, sea una injusticia.
Se creyó desde el principio. Si Würzburg tardaba en asentarse, las chicas les metieron en partido con una salida fulgurante, con 7-2 y con Ekaterimburgo, que comenzaba a sufrir el suplicio azulón, errático y fallón en ataque. Las charras se crecían en cada defensa pero, a continuación, comenzó un recital de faltas en ataque señalizadas que desestabilizó el ritmo del partido. Con un arreón de Messeman y Griner se ponían las rusas arriba con un 0-8 para concluir el parcial, 14-17.
El partido estaba atado atrás, pero daba miedo cualquier destello de calidad, de cualquiera de sus múltiples estrellas, ruso. No se produjo, y no lo hizo porque cuando parecía imposible, las azulonas apretaron los machos y comenzaron a robar y a ahogar al rival. Lo de Chrissy empezaba a ser ya un show en defensa, y anotando bandejas fáciles. Un 12-0 de parcial que dejaba en éxtasis a Würzburg, otra vez parecía hincar la rodilla el gigante de los Urales... Pero esta vez no iba a ser tan fácil y con 0-5 de parcial antes del descanso se metían, y mucho, en el duelo, 32-26.
Estaba claro que a esos guarismos las de Ekaterimburgo no están nada, nada cómodas. Avenida tenía que seguir en esa línea y se dedicó a ralentizar y manejar distancias. Ahí estuvo de 10, de 20 más bien una capitana que no sòlo dirigió y dejó "por los suelos" a bases de nivel top como Beglova o Baric, sino que, coja con un tirón, fue capaz de anotar y aguantar lo que aún restaba. 43-37, aún quedaban diez minutos.
Temíamos una tormenta visitante y lo intentó Taurasi, ya más centrada en insultar a los colegiados que en jugar. Se jugó hasta las zapatillas desesperada por una defensa sencillamente perfecta de Givens. Cada error suyo era aliento azulón. Comenzó a protestar y debió ser expulsada (decir "que te j..." en la cara del colegiado no es muy legal, y terminó de sentenciar a su equipo con una técnica. Avenida ya estaba volando, Elonu, siempre silenciosa, se había unido al festival y la magia apareció en el pabellón salmantino, enfervorizado y gritando a pleno pulmón. Volvió a caer el gigante. Por el nivel arbitral, según se entendió de las declaraciones de su entrenador, más bien por raza y coraje y eso ni el dinero lo compra
PERFUMERIAS AVENIDA 56- UMMC EKATERINBURG 43 (14-17, 18-9, 11-11 Y 13-6)
Avenida: Domínguez (13), Givens (15), Elonu (13), Nicholls (0), De Souza (8). Jugaron también Robinson (4), Moss (3), Asurmendi (0), Quevedo (0)
UMMC: Baric (3), Taurasi (5), Torrens (8), Messeman (11), Griner (10). Jugaron también: Arteshina (4), Beglova (2), Sanders (0), Belyakova (0) y Musina (0)
Partido jugado en Würzburg ante 3.500 espectadores