Este lunes se ha presentado en Salamanca la nueva Coordinadora No a la Mina de Uranio, cuyo objetivo es que la población conozca las actividades que van a desarrollar para paralizar la construcción de la mina a cielo abierto en Retortillo.

Esta coordinadora está formada por colectivos sociales y personas individuales, "que llevaban luchando independientemente y sentimos la necesidad de coordinar esfuerzos para que no queden vacíos y lograr que no se llegue a hacer el agujero". Por eso, habrá una manifestación en Salamanca el domingo 26 de noviembre en la plaza de Anaya para que las autoridades no concedan los últimos permisos.

“No podemos dejar que los intereses y la especulación de unos pocos asolen nuestra tierra. La ciudadanía tiene derecho a conocer lo que esconde el proyecto”, afirman. Así, aluden principalmente a problemas de salud pública, como mayor incidencia de cáncer de pulmón, leucemia, problemas respiratorios, etcétera, agravados en los trabajadores de la mina.

Pero también informarán a los habitantes de las comarcas de Ciudad Rodrigo y Vitigudino el impacto que a su juicio tendrá la mina sobre la ganadería y la agricultura, además del impacto medioambiental irreparable para la fauna y flora de la zona y la pérdida de los medios de vida de los pueblos de la zona. "Socioeconómicamente esta mina no es la solución para la comarca y es un proyecto con los días contados", concluye la coordinadora.