C maria frisa

C maria frisa

Salamanca

'Cuídate de mí', la novela negra más feminista

1 marzo, 2018 07:08

La escritora María Frisa presentará este miércoles en la librería Santos Ochoa de Salamanca, a partir de las 19:30 horas, su nueva obra 'Cuídate de mí', la que, según ella, es "la novela negra más feminista que se ha escrito en este país".

Licenciada en Psicología Clínica y en Trabajo social, Frisa, autora de la serie '75 consejos', ha destacado en el plano nacional e internacional como autora de literatura juvenil. Ahora, la escritora barcelonesa afincada en Zaragoza aborda la ficción para adultos con una novela de intriga basada en los testimonios reales de dos mujeres policía que trabajan en delitos de violencia de género. La novelista trata de huir de los clichés que aquejan al género negro con una historia protagonizada por mujeres en cuyas páginas se afronta otra lacra social, el ciberacoso.

‘Cuídate de mí’ es una novela de intriga que se centra en la unidad especial de la Policía Nacional encargada de investigar los casos de violencia contra la mujer y en la situación emocional de las víctimas de dichos delitos. A partir de su experiencia como psicóloga y de las entrevistas que ha mantenido con profesionales que trabajan en estos casos, María Frisa ha escrito una obra de ficción en la que se reflexiona sobre el porqué de estos crímenes, sus consecuencias y las formas de combatirlos.

Sinopsis de la obra

La subinspectora Berta Guallar y la inspectora Lara Samper trabajan en el Servicio de Atención a la Mujer de Zaragoza, una división de la Policía Nacional que se encarga de investigar los casos de delitos sexuales y de violencia de género. Berta, tenaz y empática, casada y con hijos, tiene dificultades para conciliar su vida laboral con la familiar, pero ama su trabajo y pone todo su empeño y tesón en ayudar a mujeres que sufren violencia de género. Lara, una psicóloga perspicaz e independiente, ha tenido que enfrentarse a multitud de obstáculos y actitudes machistas para ascender en su profesión debido a su impresionante belleza, pero ha llegado hasta inspectora gracias a su inteligencia y compromiso.

Cuando su jefe, el comisario Millán, les muestra un vídeo en el que se ve el cadáver de un joven calcinado, ambas afrontan el caso más difícil de su carrera. La víctima, Manuel Velasco, fue juzgado por haber violado a Noelia Abad, una adolescente que regresaba a su casa tras acudir a una fiesta con sus amigas. Velasco salió absuelto, por lo que es altamente probable que alguien se haya tomado la justicia por su mano.

Berta y Lara se enfrentan a un crimen en el que tendrán que poner a prueba toda su pericia y profesionalidad, no solo para encontrar al asesino sino para impedir que sus sentimientos contradictorios respecto a la naturaleza del delito se entrometan en la investigación. Todo mientras Berta sufre una campaña contra ella en internet por un caso de pederastia mal resuelto y Lara afronta un terrible secreto de su pasado que, de salir a la luz, podría dar al traste con su carrera policial.

- A pesar de haber escrito fundamentalmente literatura juvenil, esta vez te has decantado por una novela adulta, ¿de dónde surge la idea de escribir ‘Cuídate de mí’?
- La génesis de Cuídate de mí fue una conversación con una amiga, en la que me planteó una pregunta sobre las violaciones. En los días posteriores reflexioné y supe que era el tema sobre el que quería escribir mi novela.

- ¿Cómo ha sido el proceso de documentación de la novela?
- ‘Cuídate de mí’ es la novela a la que más tiempo he dedicado. He trabajado en ella durante los últimos ocho años cada vez que mis compromisos profesionales me lo han permitido. Obviamente he necesitado documentarme, por ejemplo, sobre autopsias, para conseguir mayor verosimilitud. Hace dos años conocí a dos mujeres policías que trabajaban en la Unidad de Familia y Mujer y supe que debía trasladar la acción a esa Unidad. Sin su ayuda hubiera sido imposible.

- ‘Cuídate de mí’ tiene como telón de fondo un tema que a día de hoy está más que nunca en boca de todos: la violencia de género.
- Lamentablemente, si no tomamos una mayor conciencia como sociedad, esta lacra va a continuar. En nuestro país más de 900 mujeres han sido asesinadas por sus parejas o exparejas en los últimos 14 años.

- Berta y Lara, las protagonistas, son mujeres fuertes, carismáticas y con las ideas claras. ¿Ha influido todo el movimiento en defensa de los derechos de las mujeres que se está viviendo en la actualidad en la creación de estos personajes?
- Como decía, el proyecto se gestó antes de la nueva oleada de feminismo empujada con proclamas como MeToo o TimesUp. Pero el problema ya estaba ahí. La novela transcurre en la actualidad por lo que es inevitable que haya influido.

- ¿Qué aporta a la novela negra?
- Mis dos protagonistas son sencillamente mujeres reales muy alejadas de los arquetipos que suelen aparecer en las novelas policíacas o de género negro. He intentado huir del papel estigmatizado en la novela negra y el thriller de la mujer como víctima. Por eso quería que mi pareja protagonista estuviera compuesta por dos mujeres.

- Hace un año, una de tus novelas juveniles sufrió un ataque en redes sociales por un contenido que era de ficción, llegando incluso a organizar una campaña para retirarlo de la venta, aunque en seguida la comunidad literaria salió en tu defensa. El tema del ciberacoso es algo que tocas en la novela. ¿Cómo viviste esos días y cómo te ha inspirado a la hora de escribir ‘Cuídate de mí’?
- Fueron unos días terribles en los que sentí una mezcla de frustración, impotencia y miedo de los que no me habría recuperado sin el apoyo de mi familia, mis amigos y, como bien dices, de la comunidad literaria que “peleó” por mí en las redes sociales y en los medios de comunicación. Al plantearme una subtrama para ‘Cuídate de mí’, supe que quería volcar esos sentimientos en la novela, por eso una de las protagonistas se ve acosada a través de un blog.

- La novela reivindica a través de sus protagonistas el machismo que sufren las mujeres que trabajan en la policía.
- Me temo que ese machismo no se produce únicamente en la Policía. Los privilegios de los que gozan los hombres solo por ser hombres, los techos de cristal, el hecho de que en los distintos ámbitos de la vida empresarial, cultural y política los puestos de dirección estén ocupados en su mayoría por hombres, perpetúa esta situación.