cardio guijuelo

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Salamanca

Guijuelo da un paso más para ser municipio cardioprotegido

5 abril, 2018 10:11

El Ayuntamiento de Guijuelo daba ayer un paso más en la consecución del compromiso de conseguir la certificación europea de ‘Municipio cardioprotegido’ con la adquisición de un nuevo desfibrilador en el nuevo Centro Deportivo. Este dispositivo se viene a sumar a los que ya existen en la Villa y que el pasado año se incrementaban con la colocación de dos nuevos en los coches de la Policía Local.

“Somos conscientes de la importancia de la adquisición de desfibriladores”, explicaba en anteriores adquisiciones la concejala de Sanidad, Yolanda Alonso Valderrama, quien se congratulaba de la adquisición hecha por el Centro Deportivo que recibía ayer por la mañana los equipos de manos de José Antonio García, director del Programa ‘Un corazón un desa’ y de Rafael Martínez, encargado de la formación. “Estamos haciendo un importante esfuerzo para contar con el reconocimiento de Municipio cardioprotegido porque entendemos que en cuestiones de salud no se puede escatimar”, añadía la concejala de Sanidad quien recalcó que “desde hoy los guijuelenses pueden estar un poco más tranquilos”.

Con la adquisición de este nuevo desfibrilador, que se suman a los dos de la Policía Local, al que existe en el Campo de Fútbol Municipal y el que tiene el vehículo de Protección Civil, Guijuelo se encuentra a las puertas de conseguir la certificación europea del European Resuscitation Councyl como ‘Municipio Cardioprotegido’. “No se trata solo de adquirir los aparatos sino que exista una buena formación y un uso correcto de los mismos”, explicaba José Antonio García.

Más del 85 por ciento de las muertes súbitas tienen origen cardiaco y el 90 por ciento se producen en entornos extra-hospitalarios. La única manera de lograr la supervivencia es realizar a los afectados una correcta Recuperación Cardiopulmonar y por consiguiente, la necesidad de un acceso rápido y fácil a los desfibriladores externos semiautomáticos. El acceso público a la desfibrilación, realizado por personal no sanitario, capaz de procurar asistencia tras la parada cardiaca, es fundamental para aumentar las posibilidades de éxito de la reanimación.