El barrio de Buenos Aires sigue siendo “el gran olvidado, una de las asignaturas pendientes” del Ayuntamiento, denuncia Ganemos Salamanca. La formación sostiene que continúan los problemas de conflictividad y de convivencia, y el sentimiento generalizado de quienes residen en el barrio es que se trata de “un gueto” donde la ley que impera es la de un pequeño grupo de personas que hacen la vida “difícil” al resto de los vecinos. Ganemos extrae estas conclusiones de la última reunión del grupo de trabajo de apoyo al barrio de Buenos Aires del Ayuntamiento, celebrada este mes.

Ante la falta de soluciones que advierten por parte del Consistorio y la “pasividad” del equipo de Gobierno del Partido Popular, creen que los problemas se enquistan, “puesto que ni desde la Consejería de Fomento y Vivienda ni desde los servicios policiales se está cumpliendo con los compromisos que estos adquirieron cuando se iniciaron las reuniones entre el Ayuntamiento y el vecindario”. Opinan que así los problemas causados por el narcotráfico no solo se mantienen, sino que se van haciendo más graves.

Las viviendas ocupadas de forma ilegal y en las que se registran problemas de delincuencia pertenecen a Fomento, por lo que, para Ganemos, dicho organismo tiene como responsabilidad realizar la evaluación de la situación de estos pisos para proceder a los consecuentes desalojos, si finalmente así se considera. Se han iniciado más de 20 expedientes hasta el momento, pero el proceso está siendo “extremadamente” lento. Además, sería necesario determinar si los inmuebles reúnen las condiciones para seguir siendo habitados, algo que también corresponde a Fomento.

Para garantizar un proceso adecuado en este sentido, Ganemos Salamanca considera imprescindible una revisión desde los servicios de Salud, no solo por Fomento, como han demandado los vecinos, para determinar el grado de habitabilidad de los edificios ocupados ilegalmente. Cabe recordar que la situación que se vive a diario en esta zona de Salamanca ha impedido que se hayan podido celebrar las fiestas del barrio durante al menos los dos últimos años.