La Hospedería Fonseca de la Universidad de Salamanca ha acogido el primer Foro Transfronterizo de Tecnologías Universitarias, una cita que pretende abrir vías de colaboración en transferencia de conocimiento entre universidades y empresas de la Región Norte de Portugal y de Castilla y León. Esta jornada de trabajo ha incluido la presentación de diversas tecnologías, sus prototipos y resultados, con el objetivo de consolidarlas a través de la colaboración entre los grupos de investigación y el mundo empresarial.

“El objetivo es abrir el camino, romper el hielo y empezar a hablar”, explica a DiCYT Jesús María de Andrés Rodríguez-Trelles, jefe del Área de Coordinación en Ciencia y Tecnología de la Fundación Universidades y Enseñanzas Superiores de Castilla y León.

Esta primera cita está centrada en las áreas Salud y Calidad de Vida y Tecnologías de la Información y Comunicación, Energía y Sostenibilidad. “Vamos a conocer proyectos singulares, especialmente significativos en este campo, con representación de las dos partes de la frontera”, comenta. En una segunda jornada que se celebrará en Portugal, en una sede aún por decidir, se hablará de Agroalimentación y Tecnologías de Fabricación.

“El proyecto pretende fomentar la colaboración, pero lo primero es identificar intereses comunes, lo que se está haciendo en sendos grupos de trabajo a ambos lado de la frontera, señala. Cada región ha definido cuáles son sus puntos de interés y mayores potencialidades en el marco de las Estrategias Regionales de Especialización Inteligente (RIS3), y una jornada como ésta sirve para aunar esfuerzos. En breve, se elaborará un plan de acción para intentar avanzar.

Un reto para todos

Octavio Pernas Sueiras, de la empresa Science & Innovation Link Office (SILO), ha ofrecido una ponencia centrada en las posibilidades de financiación de la transferencia de conocimiento en el sector biomédico, especialmente, acerca de los pasos que hay que dar y del “mapa de ayudas” nacionales y europeas con las que cuentan los investigadores.

En su opinión, las dificultades para trasladar los conocimientos científicos al mercado no se circunscriben al ámbito ibérico. “En el Reino Unido, donde he trabajado, he encontrado problemas similares”, asegura, “el hecho de obtener resultados científicos en un laboratorio y hacer de ello algo útil en el mercado no está claro en ningún sitio, no hay fórmulas mágicas”.

Según Pernas, “un gran porcentaje de empresas no resiste más allá de unos pocos años de vida, el mercado es cada vez más cambiante, sobre todo en el sector de ciencias de la vida y también en otros, como las tecnologías de la información”. No obstante, “hay una serie de pasos recomendables para realizar el proceso de la manera más eficiente y rigurosa posible”. En ese sentido, conectar el mundo académico con empresas es fundamental, ya que “no hay foros donde se puedan conocer e intercambiar experiencias”.

La financiación: compleja y específica

El mundo de la financiación pública es “un universo muy complejo”, asegura. Existen fondos para todo tipo de fases, “desde una idea más conceptual, que está muy lejos del mercado pero que es muy innovadora y va a producir algo para el consumidor a 10 o 15 años vista” y también “ideas mucho más cercanas al mercado” pero que también necesitan perfeccionarse. Por ejemplo, “puedo tener una tecnología muy buena para depurar aguas residuales pero que es muy cara; lo que hay que hacer es ver cómo podemos refinarla para que sea más eficiente en costes”.

Desde la idea más rompedora a la investigación más finalista hay diversos instrumentos de financiación que acompañan, pero cada vez son más complejos y específicos, advierte el experto. El motivo es que “hay una mayor demanda de tecnologías avanzadas, los problemas tecnológicos que quedan por resolver son cada vez más complejos y hay que ajustar más”, destaca.

Cuatro proyectos significativos

A este primer encuentro de Salamanca han acudido numerosos investigadores de España y Portugal que han podido intercambiar experiencias y comentar sus proyectos, pero se ha realizado una presentación pública de cuatro de ellos que resultan significativos.

Por parte de la Universidad de Burgos, se ha presentado SOLAR, un dispositivo de medida de radiación solar difusa, seguidores solares e integración en Smart Grids. Por parte de la Universidad de Salamanca, el proyecto PhyFire-HDWind, que permite desarrollar modelos físicos simplificados de simulación de problemas ambientales integrados en SIG; en concreto, un modelo de propagación de incendios forestales y un modelo de campos de viento de alta resolución. La Universidad de Valladolid ha estado representada por RobHand, un dispositivo robotizado para terapias de rehabilitación de mano en personas con discapacidad neuronal.

Finalmente, por parte portuguesa se ha presentado un proyecto de la Universidade do Minho, en concreto EndoSmart. Se trata de una nueva generación de endoscopios gastrointestinales y otros dispositivos de salud biomédica.

La jornada

Esta jornada se enmarca dentro del proyecto “Espacio T3 – Transferencia Tecnológica Transfronteriza”, financiado por el Fondo Europeo de Desarrollo Regional (FEDER) en el marco del programa Interreg V-A España Portugal 2014-2020 (POCTEP). Esta iniciativa está diseñada para establecer un espacio transfronterizo de colaboración estable entre universidad y empresa como base para crear empleo de calidad y potenciar el crecimiento sostenible de las dos regiones implicadas: Región Norte de Portugal y Castilla y León, en el marco de las Estrategias Regionales de Especialización Inteligente (RIS3), apostando por una I+D+i de excelencia, cercana al mercado y alineada con los campos y sectores en los que las regiones participantes son competitivas.