El CD Guijuelo se conjuró contra los espíritus, brujas, megias y duendes, que haberlos haylos, para conseguir sumar tres puntos vitales en momentos de angustia, y, de esta forma, situarse en la mitad de la clasificación. Falta le hacía a los chacineros sumar, tras un final de año desastrosos en cuanto a resultados. Los motivos, muchos, aunque los más conocidos las malditas lesiones.
En cuanto al partido disputado esta tarde contra el Celta B en El Municipal, el Guijuelo jugó una buena primera en la que consiguió el gol de Pepe Carmona que, a la postre, fue el que le dio la victoria. Por contra, la segunda mitad fue mala. Con un Guijuelo conservador que fue sometido por los jóvenes gallegos, pero sin recompensa en el resultado. Un partido que finalizó con los locales pidiendo el tiempo.