El Pleno del Ayuntamiento de Salamanca ha dado el visto bueno a la aprobación definitiva de una parcela al Consejo Superior de Investigaciones Científicas para la creación de un Campus Agroambiental que contribuirá al avance del conocimiento y al desarrollo económico, social y cultural de la ciudad.
Se ubicará en este espacio la nueva sede del Instituto de Recursos Naturales y Agrobiología, dependiente del Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades.
Por otra parte, el Pleno Municipal aprobó el pasado 28 de diciembre la cesión de otro solar a la Universidad de Salamanca para acoger la Facultad de Ciencias Agrarias y Ambientales
Estas dos parcelas de 10.513 y 17.615 metros cuadrados, respectivamente, se ubican en el nuevo sector denominado La Platina, próximo al Campus Miguel de Unamuno y al Instituto de Biología Funcional y Genómica. Por tanto, será un corredor al servicio del avance del conocimiento y del desarrollo económico, social, científico y cultural de Salamanca.
El nuevo IRNASA
La nueva sede del Instituto de Recursos Naturales y Agrobiología de Salamanca tiene previsto integrar a unas 59 personas; de ellas, 17 serán investigadores de plantilla, 28 personal de apoyo científico y de gestión, y 14 serán contratados para integrar los departamentos de Desarrollo Sostenible de Sistemas Agroforestales y Ganaderos, Estrés Abiótico y Procesos de Degradación Medioambiental y su Recuperación, con un total de seis grupos de investigación.
El nuevo centro de investigación dispondrá de: un edificio central para oficinas, salas de conferencias y laboratorios de uso común (de unos 2.600 metros cuadrados en total); un invernadero (de unos 500 metros cuadrados) con zona de almacén de materiales más salas de fitotrones, crecimiento de plantas, cabinas de flujo laminar y zona de limpieza y desinfección de materiales para plantas; una parcela experimental para cultivo de plantas de unos 300 metros cuadrados, para ser usada por varias instituciones; un edificio para albergar animales de experimentación con zona de almacén de materiales, laboratorios de bioseguridad BSL2 y BSL3, y zonas de limpieza y desinfección de materiales para microorganismos (de 600 metros cuadrados aproximadamente); una parcela experimental para alojar temporalmente a animales al aire libre (de unos 300 metros cuadrados) y, finalmente, integrará también zonas verdes y vías de acceso.