El PP asegura que mientras la nueva alcaldesa les entretenía diciendo que el Corpus no estaba organizado, que la piscina no se podía abrir a tiempo, "cuando estaban los trabajadores contratados desde hace semanas", y otros asuntos varios, este martes se ha podido conocer que tiene intención de aprobar en el próximo Pleno Municipal un sueldo para ella de 3.000 euros mensuales, más las dos pagas extraordinarias de 3.000 euros cada una. En total, 42.000 euros distribuidos en 14 pagas.
A mayores de esto, siempre según los populares, el Ayuntamiento tendría que asumir los gastos de Seguridad Social, así como las cuotas empresariales que corresponda, lo que supondría alrededor de un 30% más de gasto sobre esos 42.000 euros. Unos 54.600 euros de gasto total.
De este modo, se convertiría en la primera alcaldesa de Béjar con sueldo, pues hasta ahora los alcaldes de Béjar nunca han tenido sueldo. Así lo ha recordado el Partido Popular que dice no haber establecido nunca un sueldo para el alcalde cuando ha gobernado. Aseguran que puede parecerles razonable que una persona que tenga que dejar su trabajo para ser alcaldesa pueda tener una asignación del Ayuntamiento equiparable a lo que venía cobrando dicha persona en su trabajo personal, pero desde luego no en esa cuantía, "muy alejada probablemente de lo que la señora Martín Vázquez venía cobrando en su puesto de trabajo actual". "Ellos mismos decían que Béjar no estaba para tirar cohetes, tampoco para el lucro personal de la señora alcaldesa", recuerdan.
Por si fuera poco, la nueva distribución de competencias entre los cinco concejales del PSOE ha multiplicado considerablemente el número de delegaciones específicas a razón de 60 u 80 euros por delegación, más cobro por asistencia a plenos, comisiones, y junta de Gobierno, aumentando por tanto considerablemente la asignación a los concejales del equipo de Gobierno socialista.
El Partido Popular asegura que no va a apoyar este despropósito y espera que tampoco lo hagan los otros dos partidos de la oposición, sobre todo Ciudadanos, el cual exigió al Partido Popular de Béjar elaborar un pacto de gobierno en el que no podía haber dedicaciones exclusivas ni liberaciones, pues según los mismos, ya había muchos funcionarios para hacer el trabajo.