Con más de 150 años de experiencia, Joselito, empresa ubicada en la localidad salmantina de Guijuelo, atesora los secretos de una tradición heredada a lo largo de seis generaciones que han compartido como único objetivo elaborar el mejor jamón del mundo.
Hoy la marca de referencia mundial en el sector de la agroalimentación acomete el reto de la transformación digital, “como apoyo a nuestro proceso productivo, cien por cien natural y tradicional”, y lo hace de la mano de Telefónica, empresa líder en el mercado de las telecomunicaciones.
Joselito apuesta por la tecnología “como herramienta de control, de información y conocimiento, que nos ayudará a la hora de aprender y perfeccionar el resultado final para garantizar la máxima calidad”.
La marca Joselito, una joya gastronómica aclamada por los grandes genios de la gastronomía y los críticos más importantes, apuesta por aunar tradición y modernidad, reforzando la estabilidad de sus centenarios procesos de producción con la mejor conectividad de fibra óptica, la tecnología de banda ancha más avanzada del mundo, e incorporando sistemas de ciberseguridad que garanticen la robustez de sus comunicaciones.
Presente en los restaurantes y tiendas gourmets más prestigiosos de 56 países, esta empresa familiar centenaria, “ha visto la necesidad de evolucionar y transformarse digitalmente para seguir siendo esa marca referente, pero sin perder la esencia de la tradición en nuestras formas de hacer artesanales”, asegura José Gómez, garante de esta tradición y perteneciente a la sexta generación de directivos la empresa.
El proceso de transformación de Joselito, como el de cualquier pyme, “pasa primero por asegurar los básicos -conectividad y seguridad- y luego continuar con herramientas de gestión del puesto de trabajo y trazabilidad de los procesos”, asegura Marisa Urquía, Directora de Empresas de Telefónica. “El valor del servicio aportado por la compañía de telecomunicaciones es garantizar la digitalización de todo el proceso a través de la tecnología, desde el nacimiento del cerdo hasta la venta del producto final, añade Marisa Urquía.
Para ello se ha implantado la mejor solución de conectividad y se han virtualizado las comunicaciones, que ahora se soportan en la “nube”. También se han implementado sistemas de seguridad en la red.
Eficiencia energética, trazabilidad y puesto de trabajo Digital
En una segunda fase, ambas compañías están trabajando en otras soluciones de eficiencia energética, trazabilidad y puesto de trabajo digital, “que nos ayude a mantener nuestro sello de calidad extrema y a encontrar nuevas vías de mejora gracias a la tecnología”.
Para ello se exploran herramientas tecnológicas como el análisis de datos (Big Data) o Internet de las Cosas y su aplicación al proceso de trazabilidad del producto, “de manera que, desde la pequeña localidad de Guijuelo, podamos seguir dando el mejor producto ibérico al mercado internacional y abrir nuevas vías de expansión”.