Los líquenes de la dehesa salmantina alertan del cambio climático
El biólogo Ignacio Santa-Regina lleva, junto a su hija María del Carmen Santa-Regina, unos 20 años analizando y catalogando los líquenes presentes en las rocas, suelos y árboles de la dehesa de Salamanca.
En la presentación de su libro 'Líquenes de la dehesa salmantina', este experto ha reconocido que "algunos" de estos ejemplares han ido "desapareciendo" en los últimos años y otros, debido al aumento de las temperaturas y a la sequía, han visto reducido su tamaño y cuentan con menos biomasa.
Especialmente, según ha explicado, esa reducción de líquenes está más patente en las ciudades, donde se han visto afectados también, y en mayor medida que en el medio rural, por la contaminación del aire.
Por ello, ha animado a "recapacitar" y a escuchar los mensajes que ofrecen organismos como los líquenes, que son "callados" pero que aportan información sobre "qué hace" y a "dónde va" la sociedad. "Es momento para recapacitar", ha puntualizado.
Sobre los líquenes, ha explicado que surgen de la asociación de un alga con un hongo y una bacteria, que son "colonizadores primarios de todos los ecosistemas" y que "dan información sobre el hábitat" en el que se encuentran, pues "son muy sensibles a cualquier cambio ambiental".