El Ayuntamiento de Santa Marta de Tormes ha comenzado la campaña de prevención contra la oruga procesionaria. Para ello se ha comenzado la revisión de las zonas conflictivas y con más incidencia en años pasados como son las proximidades a los centros escolares, la carretera de Naharros, el pinar de Valdelagua, el paseo Fluvial de La Fontana o en la calle Ciudad de Ávila.
En esta primera revisión se irán retirando todos los bolsones y nidos de procesionaria y en aquellos árboles de difícil acceso se intalarán anillos en los troncos para evitar que las orugas bajen al suelo.
En aquellas zonas que se vea una mayor incidencia se realizará un tratamiento de endoterapia para eliminarlas. Con este tratamiento, inocuo para personas, animales y plantas, se consigue que el insecticida llegue hasta la savia de los árboles y se incorpora a las hojas que serán el alimento de las larvas. Por último, en el mes de marzo se realizará otro tratamiento con feromonas para evitar la reproducción.
La concejal de Fomento, Marta Labrador, ha explicado que “se está conviertiendo en un problema para algunas zonas de la localidad para las mascotas por su toxicidad y desde el Ayuntamiento buscamos controlar estas plagas con tratamientos preventivos como la retirada los bolsones de aquellos pinos más afectados así como la colocación de anillos para evitar la bajada y la endoterapia, que aplicaremos de forma selectiva en aquellas zonas más afectadas”. Labrador recordó que “debido a los tratamientos que se vienen realizando de forma continuada durante los últimos años se aprecia una menor incidencia de esta oruga”.