El coronavirus visto desde los ojos de una niña de trece años
Irene Casas es una niña de trece años salmantina que, al igual que sus compañeras, se mantiene confinada desde hace ya más de tres semanas en casa. Su parte especial, como mucho, reside en su madre, que trabaja en una residencia de mayores, sector tan fuertemente golpeado por el coronavirus.
Precisamente, su propia madre ha hecho llegar una carta de esta joven que cursa Primero de la ESO en el colegio Santa Teresa de Jesús. Por su propia cuenta, ha decidido escribir unas líneas para explicar cómo se siente ella ante la situación, para contar su día a día que, al inicio, golpeaban como losas pero que ahora supone "una oportunidad de descubrir cosas nuevas" y pasárselo genial con su familias, sus amigos a través de vídeollamadas y los diversos juegos.
Además, referente al colegio, explica la dificultad que supone dar clases de manera telemática pese al esfuerzo de los profesores, a los que les agradece su labor. Y sobre su madre, de la que asegura estar orgullosa, solo le queda animarla y escuchar la difícil situación que tiene que vivir en la residencia.
La carta íntegra:
Tengo 13 años y mi madre trabaja en una residencia de mayores. Hoy he sentido la necesidad de hacer llegar cómo estoy sintiéndome ante esta situación. Básicamente voy a contar un poco de mí día a día. Sin darme cuenta ya han pasado 20 días que al principio se me hicieron muy duros pero ahora cada día es una oportunidad de descubrir cosas nuevas como talentos ocultos o alguna pasión, al principio pensé que esto iba a ser muy largo y que no aguantaría mucho en casa con mi madre y mi hermana pero realmente me lo estoy pasando genial, todos los días hay risas, fiestas, videollamadas con amigos y familiares, algún partido al ping-pong, aunque sinceramente también hay alguna bronca porque es normal que alguna vez choquemos.
En cuanto al colegio es un poco difícil dar las clases desde casa, pero quiero dar las gracias a todos los profesores que están dando lo máximo para hacer esto más ameno y lo mejor posible, por ejemplo: haciendo videollamadas en clase para que podamos entender mejor la materia que estemos dando o haciendo videos explicando un tema y proponiéndonos muchos juegos como un scape room de matemáticas que estaba bastante bien y que me gustó mucho.
Cada vez que mi madre entra por casa siempre le decimos que se lave las manos y aunque se las haya lavado siempre tengo miedo de que en unos días mi madre o mi hermana empiecen a tener síntomas y se cojan el virus, cada día mi madre me cuenta como está yendo la situación en la residencia y la verdad es que es horrible y hace lo posible para llevarlo bien pero entiendo que es difícil y que cada día está expuesta a un riesgo pero hay que seguir adelante para vencer a este virus y por último quiero decirle a mi madre que estoy muy orgullosa de ser su hija y que hay que tener fuerza. JUNTOS PODEMOS, #YOMEQUEDOENCASA.