Los sindicatos CCOO y UGT han emitido un comunicado conjunto con motivo del Día Internacional de la Salud y la Seguridad en el Trabajo que se celebra este 28 de abril que, en 2020, "no puede ser como el de otros años". 

La crisis del coronavirus ha provocado que sea diferente y el recuerdo de los sindicatos, dicen, "debe ser para esas víctimas, pero también para todas aquellas personas que desde sus puestos de trabajo se han convertido en el principal baluarte de defensa frente a la enfermedad, poniendo en riesgo su salud". 

Así, inciden en la defensa de la salud laboral como parte indisociable de la salud pública, como se demuestra ahora con el coronavirus. Además, alertan de "la contradicción entre el mantenimiento de un sistema económico que prima la obtención de beneficios empresariales frente a la salud de las personas trabajadoras". 

De esta manera, hablan de la austeridad tras el 2008 que han diezmado los servicios públicos y, a la vez, se ha producido una reducción de inversiones en prevención de riesgos laborales en las empresas y de financiación de políticas públicas en materia preventiva. Así, dicen, en la última década han repuntado los accidentes de trabajo. 

Además, cuentan, "la llegada de la pandemia de COVID-19 ha terminado por arrasar la prevención en España. Los servicios de prevención, actores indispensables para la organización e integración de las actividades preventivas en las empresas, en muchos casos mostraron tremendas limitaciones a la hora de hacer frente al reto de evaluar y establecer medidas preventivas para limitar las exposiciones al virus, convirtiendo en papel mojado las instrucciones de las autoridades sanitarias", algo que ha sido exponencial en el caso de los servicios de prevención ajenos. 

Sin embargo, destacan, también "se ha echado en falta en este contexto una mayor presencia de las instituciones públicas en el ámbito laboral". Los sindicatos reclaman mayor coordinación entre los departamentos de sanidad y trabajo.

Por otro lado, CCOO y UGT aseguran que seguirán trabajando para afrontar esta crisis sanitaria defendiendo a la clase trabajadora, "denunciando donde sea preciso y exigiendo el cumplimiento de la normativa en materia de prevención de riesgos laborales, normativa que recordamos ha de cumplirse, incluso durante el estado de alarma".