La primera teniente de alcalde del Ayuntamiento de Salamanca y militante de Ciudadanos, Ana Suárez, ha mostrado su convencimiento de que la decisión de apoyar el estado de alarma, que mantuvo Inés Arrimadas en el Congreso de los Diputados, es "la adecuada y más útil" para "no dejar tirados a millones de españoles".
En una rueda de prensa telemática que ha tenido lugar este viernes, ha comentado que siente "vergüenza" de que un grupo parlamentario de diez escaños tenga que obligar a no dejar tirados a millones de españoles y ha afirmado que Inés Arrimadas "ha tomado la decisión más adecuada y ha aceptado la responsabilidad de lo que ocurra con esa decisión". De hecho, ha insistido, "cuando el criterio es el bien de los españoles, estamos más cerca de las decisiones correctas".
No en vano, ha asegurado que quien ha tomado las decisiones equivocadas es el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, "que ha entendido que puede hacer lo que quiera cuando quiera". "Hay que pactar con el diablo para que cinco millones de españoles no se queden tirados".
Así, la rueda de prensa ofrecida junto al también concejal en Salamanca Fernando Castaño, ha servido para expresar la opinión del Grupo Municipal Ciudadanos al respecto de la situación actual, y han criticado la "falta de información" del Gobierno al respecto.
"Ha provocado un deterioro de la Marca España. Se nos vislumbra como un país inseguro porque no se explican las cosas y no hay planes", ha afirmado Castaño. "No sabemos ni siquiera el nombre de las personas que van a decidir sobre el futuro de las decisiones sobre la pandemia".
De hecho, aseguró que la información es necesaria para tomar las mejores medidas también en el terreno económico para posteriormente reivindicar Ana Suárez que es el "momento más difícil para los políticos en los últimos 100 años" ya que "hagas lo que hagas, existe una gran probabilidad de equivocarse".
Pese a ello, le lanzó un "tirón de orejas al Gobierno" porque "no ha tomado las medidas necesarias y seguimos sin información, tomando decisiones sin una información rigurosa de qué implicaciones tienen estas decisiones". "Es muy difícil acertar", comentó.