El Ayuntamiento de Salamanca ha acogido en la mañana de este jueves un nuevo encuentro entre todos los colectivos que participan en el proceso de carga y descarga, en el que se ha abordado la elaboración de un plan piloto, -que entrará en vigor en la fase 1 de la desescalada y permanecerá en evaluación hasta la entrada en la fase 2-, con la finalidad de reordenar esta tarea una vez que la actividad comercial ha regresado a las calles de la ciudad de forma más intensa tras la declaración del estado de alarma con motivo de la pandemia del coronavirus.
En la reunión, que ha estado presidida por el concejal de Protección Ciudadana, Tráfico y Transportes, Fernando Carabias, y el concejal de Comercio, Juan José Sánchez, también han tomado parte el jefe de la Policía Local de Salamanca, José Manuel Fernández, junto a representantes de la Cámara de Comercio, de la Asociación de Empresarios de Hostelería de Salamanca y asociaciones de comercio, transporte y distribución.
Durante la sesión celebrada en el Consistorio se ha puesto de manifiesto que el objetivo principal de este plan, -entre otros-, es garantizar la seguridad de los peatones y establecer los cambios necesarios para adaptar la regulación de la carga y descarga vigente a las circunstancias actuales que se han venido recogiendo en las distintas aportaciones que han hecho llegar al Ayuntamiento las asociaciones y colectivos implicados en este proceso en contactos previos.
El plan, tal y como se ha dado a conocer, se aplicará en la Plaza Mayor, en la Plaza del Poeta Iglesias, la calle Quintana, la Rúa Mayor y la calle Bordadores. Entre las medidas generales, el documento establece para las vías anteriormente citadas que la hora máxima para el desarrollo de esta actividad será las diez de la mañana; sin embargo, esta franja se ampliará en una hora, -hasta las 11-, para sus vías perpendiculares.
Asimismo, se establecerán sentidos únicos de circulación en la Rúa Mayor (desde la Plaza de Anaya a la calle Quintana), en la calle Felipe Espino (desde la Rúa Mayor hasta San Pablo), en la calle Sánchez Barbero (hacia la Rúa Mayor) y en la calle Bordadores (desde la Cuesta del Carmen hasta las Úrsulas). En la Rúa Mayor, la calle Felipe Espino, la calle Sánchez Barbero y la calle Bordadores se establecerán ubicaciones específicas para la carga y descarga quedando prohibido ejecutarse fuera de dichos espacios.
Según este protocolo, los vehículos de carga y descarga accederán a la Plaza Mayor por la Plaza del Corrillo y la calle Zamora quedando como única salida para los mismos la Plaza del Poeta Iglesias. Por su parte, el estacionamiento quedará restringido junto a las farolas centrales del ágora. Además, se establecerán otras ‘islas’ de estacionamiento en la calle de las Úrsulas, la calle Jesús y la calle Pan y Carbón donde los vehículos podrán detenerse mientras realizan la labor de carga y descarga entre las 7 y las 12 horas y entre las 16 y las 18 horas. Para este último caso, solamente podrán estacionar los vehículos incluidos en el Sistema de Control de Accesos a calles peatonales.
Fruto del consenso y aportaciones en diversas sesiones de trabajo
Este plan piloto es fruto de otros encuentros anteriores, -que han tenido lugar en los meses de febrero y marzo-, en los que ya se había valorado que se adelantara el horario de apertura de los establecimientos de hostelería para que la carga y descarga terminara antes de lo habitual.
Asimismo, ya se aprobaron diversas propuestas en materia de seguridad en zonas peatonales entre las que destacan la conveniencia de dotar a los vehículos de la tecnología necesaria para garantizar la seguridad de peatones y resto de conductores.
Por otro lado, también se plantearon medidas en materia de formación a los repartidores, la cual sería asumida por la Policía Local, encargándose el cuerpo municipal de impartirla una vez que esté completamente definida la futura normativa que regulará todo el proceso de carga y descarga.