El Complejo Asistencial Universitario de Salamanca retomará el lunes las consultas presenciales en todos los servicios y las pruebas complementarias a los pacientes ambulatorios, según establece el plan de desescalada establecido en el hospital por la COVID-19.
Este proceso a seguir, adoptado ante la excepcionalidad por los efectos de la pandemia y ante el "incremento exponencial de la presión asistencial", será un paso más en el propósito de recuperar la normalidad de la actividad asistencial.
Con esto, según un comunicado del Sacyl recogido por Europa Press, el complejo asistencial busca "reducir de forma escalonada las medidas de restricción asistencial establecidas; restablecer de forma progresiva la actividad habitual; mantener e incrementar recursos para asistir a pacientes no relacionados con el coronavirus, al tiempo que continúan las medidas de prevención, asistencia y control de pacientes con coronavirus".
No obstante, el Sacyl ha puesto de relieve que "durante la contingencia, todos los servicios han ido revisando las consultas programadas día a día. Se han realizado consultas telefónicas y no presenciales, además de consultas presenciales en pacientes preferentes o cuya atención no podíaser diferida".
Ahora, con la nueva situación, los profesionales procederán al aumento controlado y filtrado de la actividad presencial, con una serie de medidas especiales que, por ejemplo, suponen la habilitación del acceso principal y el de semisótano del Hospital Clínico Universitario de Salamanca, el acceso principal del Hospital Virgen de la Vega (Servicio de Urgencias/Consulta Oftalmología) y el acceso principal al Edificio de Consultas (Antiguo Materno) y Hospital Virgen de la Vega.
El Sacyl ha explicado que todo paciente que acuda a consulta externa o a la realización de alguna prueba complementaria tendrá que mostrar la acreditación de su cita previa en el control antes de que le sea permitido el acceso.
ACCESO Y MEDIDAS
Además, solo estará permitido un acompañante en caso de menores de edad o personas dependientes y el paciente podrá acceder a la zona de consultas 30 minutos antes de la cita.
En todos los casos, los pacientes deberán portar mascarilla; si no tienen, se les facilitará. Asimismo, los profesionales que realicen su labor en consulta externa o hagan pruebas complementarias llevarán un equipo de protección individual que incluirá bata, mascarilla, guantes y protección ocular.
Además de pedir una "estricta higiene de manos, antes y después de las consultas", las salas de espera contarán con carteles informativos para informar de estas mismas medidas y otras como el distanciamiento entre personas.
Entre las nuevas medidas, Sacyl ha destacado que "se va a evitar la duplicidad de pruebas, posibilitando realizarlas en el ámbito de Atención Primaria para evitar el desplazamiento de pacientes y potenciando el modelo de consulta de acto único".
También, los responsables van a evaluar las necesidades de sucesivas consultas o pruebas, su margen temporal, y la posibilidad de realizarse de manera telemática.
Además, habrá prioridad en la atención para los grupos de riesgo y adultos mayores de 60 años en los primeros turnos del día; los profesionales citarán a los pacientes con un margen de tiempo suficiente para su atención y los sanitarios tratarán de no acumular retraso en el desarrollo de la actividad, con el fin de evitar aglomeraciones en las salas de espera.
Finalmente, el Sacyl ha recordado que estas medidas y acciones pueden variar según la evolución de la pandemia COVID-19 y de las instrucciones que surjan desde la Gerencia Regional de Salud y el Ministerio de Sanidad, Consumo y Bienestar Social.